Algo se está moviendo en Cuba. Desde hace un par de días, los informativos hacen públicas las protestas de ciudadanos de la isla caribeña, exigiendo el fin del régimen comunista. La batalla por la información ha estallado con fuerza: los partidarios del sistema cubano menosprecian la ofensiva, mientras que sus detractores las amplifican al máximo. Es difícil calibrar hasta qué punto son mayoritarias o residuales, debido a la distancia y a las férreas medidas de control de este país. Ahora bien, si tomamos como termómetro los testimonios de las redes sociales, el canal más directo de comunicación en estos casos, se puede deducir que efectivamente, hay tensión. Y algo más.
Si no fuera así no se entenderían determinados sucesos: es evidente es que las fuerzas de seguridad intentan callar cualquier manifestación de desafección, y lo hacen con contundencia. Ni siquiera la presencia de medios extranjeros los arruga. Lo hemos podido veren directo durante la emisión del 'Todo es Mentira', hoy sin Risto Mejide. En su lugar, Marta Flich se ha encontrado con una de las situaciones más extremas y alarmantes que ha vivido en este espacio de 'La Fábrica de la Tele': mientras entrevistaban vía videoconferencia a la youtuber cubana Dina Stars, la policía ha irrumpido en su domicilio y la ha detenido. La escena ha sido chocante.
Dina explicaba cómo está viviendo la situación y exponía su posición contraria a los gobernantes de Cuba: "Hace mucho tiempo que no creemos en ningún régimen, el presidente de Cuba no nos representa". De sopetón, levantaba una mano con cara de espanto pidiendo la palabra a la presentadora. Algo no iba bien. Un grupo de agentes golpeaba la puerta de su casa, y el programa se detenía: "la seguridad está ahí fuera, tengo que salir". Una compañera tomaba el relevo y se escondía en una habitación, relatando lo que pasaba. De todo eso era testigo de excepción la escritora catalana Pilar Rahola, colaboradora habitual del programa, que quedaba estremecida como el resto del equipo y la audiencia de Cuatro. Después de un intento infructuoso por escuchar lo que le decían a la youtuber, Stars volvía a conectar para enviar un último mensaje realmente preocupante: "hago responsable al gobierno de cualquier cosa que me pueda pasar. Me obligan a ir con ellos. Me tengo que ir". Su estado de nerviosismo y angustia no podía ser fingido.
El plató quedaba en shock, y Rahola lo definía así: "ha sido terrible". La catalana es muy crítica con los que blanquean lo que considera como "dictaduras de izquierda", y este episodio no ha hecho más que reforzar su posición. La detención en directo ha puesto las redes sociales al rojo vivo.
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Risto, que preparaba la edición nocturna del 'Todo es verdad', se habrá quedado pegado a la silla. Siempre que no está, pasan cosas interesantes e importantes en aquel plató. ¿Casualidad?