El día después de que Shakira haya colgado una foto donde sus fans se preguntan si se ha puesto bótox o un exceso de maquillaje, Gerard Piqué también ha puesto morritos para besarse, no con su pareja, sino con un enemigo íntimo, Sergio Ramos. La relación de los centrales de Barça y Madrid, compañeros unos años en la selección española, rivales endémicos en los clásicos, ha pasado por muchos momentos. Algunos muy tensos, especialmente cuando el tema de la lengua estaba de por medio:
Que si no se soportan, que si tienen negocios juntos, que si se llevan bien, que si se llevan a matar... Sólo ellos dos saben si la relación que tienen es estrictamente profesional, si es cordial o si son amigos. Ahora Piqué ya no juega con España. Pero en España tienen obsesión con lo que pasó en Barcelona hace unas semanas después de la sentencia y lo que puede pasar o dejar de pasar este miércoles con el clásico del Camp Nou y con Tsunami Democràtic. Y en esta previa, uno de los capitanes azulgranas y el capitán del Madrid protagonizan una pintada con la que han despertado los barceloneses. Con el trasfondo político, alguien los ha pintado en el Paseo de Gracia, junto a la Plaza Catalunya en actitud cariñosa, a punto de darse un beso en la boca y bajo el lema "Kiss and talk":
No es la primera vez que aparecen dibujos como estos. Los mismos protagonistas ya aparecían igual de puestos en materia en el número de la revista Líbero correspondiente al clásico del 2017. O en una pintada en la calle muy similar, Leo Messi y Cristiano Ronaldo cuando este vestía de blanco:
No creemos que encima del césped del Camp Nou sean tan cariñosos el uno con el otro. Y lo que pase fuera del césped, ya se verá.