Si les parece que la Familia Real española da mucho juego mediático, imagínense qué ocurriría si vivieran ustedes en Dinamarca. La monarquía española es un juego de niños al lado de la danesa, en donde la reina Margarita II -la única monarca europea tras la muerte de Isabel II- ha decidido despojar de los títulos de príncipe y princesa a sus cuatro nietos. Su Majestad La Reina Margarita tiene dos hijos, el príncipe Federico (heredero del trono) y el príncipe Joaquín. Este último es un perla: está casado con Su Alteza Real Marie -allí no le llaman 'Doña' como a Elena- y hace más de una década fue portada en las revistas del corazón danés por estar a punto de plantarle un beso en los morros a su cuñada Mary, la mujer de Federico, su hermano. De tintes surrealistas.
Como de tintes surrealistas es lo que vamos a contaros a continuación. La cuestión es que la decisión de la reina de despojar a sus nietos ha sentado como una patada en el culo a su nuera Marie, a su hijo Joaquín y, por supuesto, a sus 4 nietos. Se ve que todos lo están pasando fatal. Ellos son Nicolás (23), Félix (20), Henrik (13) y Atenea (10). Estos dos últimos son hijos de Marie y los dos primeros de la antigua mujer de Joaquín, Alexandra. Como ven, una familia real un tanto peculiar. La cuestión es que quien lo está pasando peor es Atenea. Está sufriendo mucho, especialmente en el cole.
Tal y como cuenta su mami Marie, la niña de diez años se siente, en parte, intimidada en el cole. "Sus compañeros se acercan a ella preguntándole si ya no es princesa. La están intimidando", relata Su Alteza Real la princesa Marie. Unas declaraciones a las que se le suma su esposo. Joaquín, triste, considera que sus hijos "están perdiendo la identidad". Los niños, según los dos padres, se han visto expuestos a una situación pública para la cual no han podido ser preparados. Esperemos que se recuperen. Ahora ya son como el resto de los mortales: ciudadanos de a pie. Si quieren ser príncipes y princesas siempre podrán releer la leyenda de Sant Jordi y el dragón.
Alexandra, muy afectada
La otra damnificada tras la drástica decisión de Margarita II ha sido Alexandra. La ex mujer del príncipe Joaquín estaría pasándolo muy mal. "Triste y en shock", asegura la que, con la medida de la reina, pasará a recibir el trato de condesa de Monpezat. Sus hijos, Félix y Nicolás, ahora no serán príncipes, pero sí condes. También de Monpezat. Como ven, los títulos nobiliarios no se acaban nunca. Este será en honor a su abuelo paterno Henrik, fallecido en el año 2008.