Este domingo la selección española de Luis Enrique ha disputado la final de la Nations League, un torneo que se ha inventado la UEFA para sacar cuatro dineritos más.

La Roja llegaba a la cita sin pena ni gloria, con más sombras que luces, pero después de las semifinales contra Italia y de la final contra Francia, han salido reforzados, especialmente por el juego y la buena imagen que dieron, a pesar de perder, por un gol en clamoroso fuera de juego de Mbappé, que el árbitro y el VAR incomprensiblemente no anularon.

España - Francia, final con polémica en la Nations League / Efe

Sea como sea, el combinado español dejó una buena imagen y una serie de consideraciones en clave azulgrana que habría que tener en cuenta de cara al retorno del Barça al trabajo, con tres citas que pueden ser primordiales de cara al futuro: partido de Liga contra el Valencia este domingo, contra el Dinamo de Kiev en la Champions la próxima semana y clásico contra el Madrid en el Camp Nou dentro de dos fines de semana.

Una, que Gavi es un jugador maravilloso y que puede ser el presente y el futuro del Barça; dos, que un equipo sin estrellas, pero con peloteros, como es ahora la Roja, puede hacer un buen fútbol de toque, cosa de la que tendría que tomar nota Ronald Koeman; y tres, que Sergio Busquets, a quien muchos dan por muerto y por enterrado, todavía tiene cuerda para rato y todavía puede hacer actuaciones como la de este domingo, cuando recibió el premio a mejor jugador del partido.

Sergio Busquets / Europa Press

El partido se disputó en el estadio del Milan, en San Siro, y entre la parroquia que daba apoyo a la selección española, tres personas que estaban muy orgullosas del mediocentro del Barça, su mujer Elena Galera y sus dos hijos, Enzo y Levi, de cinco y tres años.

La modelo y empresaria ha colgado diferentes vídeos en las redes sociales protagonizados por el jugador del Barça y de la Roja. El videomarcador con su cara cuando anunciaban su nombre, el momento del apretón de manos con los árbitros, como capitán, antes de que empezara el partido y el momento donde le reconocían el galardón de haber sido el mejor encima del césped.

Pero aparte de la familia desplazada al estadio milanés, Galera también ha publicado una imagen muy curiosa donde se ve uno de los bulldogs de la pareja, mientras su propietario saltaba al césped. Así vemos a Minnie, con la bufanda de la selección española atada al cuello o la lengua fuera, mientras Galera lo acompaña con el emoticono de una pelota de fútbol y una cara suya llorando de risa al ver el animal con esta pinta.

La verdad es que el perro pone la misma cara de alucinado que muchos seguidores cuando vieron jugar Busquets a un nivel que últimamente no es que sea el pan de cada día, precisamente.