“En Badalona se puede comer muy bien a la carta, también en restaurantes de lujo, tienen muy buena cocina exótica, pero no es esto el que volamos. Queremos un clásico difícil de encontrar: el equilibrio perfecto entre calidad y precio. "Juego de cartas" busca el mejor restaurante de menú en Badalona”, así empezaba el ‘Joc de cartes’ de este miércoles.
La ruta empezaba en ‘La Badalonesa’, restaurante regentado por José Manuel Moreno, y quién se llevó la puntuación extra por su arroz que estaba perfecto y ajustado a su precio. Después visitaron ‘La Leonetta’, el restaurante de Rocío Buzón, el más flojo tanto para Marc Ribas como para el resto de concursantes.
El tercer restaurante es uno de los más conocidos de Badalona, ya que se encuentra justo al inicio del paseo marítimo, muy cerca del Pont del Petroli. Se trata de Iberic Fusion, a las manos del joven chef Marc Domènech. Se encarga de servir una cocina mediterránea y de fusión. El restaurante de Marc ha sido el ganador de la noche por muy poco, sin embargo, sus compañeros han sido muy críticos a la hora de degustar el menú de 15,95 euros. Según el resto de comensales con ese dinero no se puede hacer frente al producto que ofrece Iberic Fusion y que te salga rentable, todos ellos se sintieron engañados. Por este motivo, le puntuaron la comida con una nota menor. ¿O por qué tenían miedo?
No obstante, el verdadero enfrentamiento se vivió en la mesa de confrontación con Montse como protagonista, la dueña de Ca La Berta, el restaurante con una decoración más elegante. Sin embargo, aunque el producto era bueno, notaron que Montse es autodidacta.
Los concursantes se sintieron decepcionados con Montse
Curiosamente, Montse es quien peor valoró a sus compañeros, especialmente a José Manuel Moreno, quien se sintió decepcionado con ella por sus puntuaciones. Mientras el resto la valoró con una nota alta, ella le puntuó muy bajo, un cinco en la comida. “Montse ha venido a jugar”, dijo José Manuel, mientras Montse no conseguía mediar palabra.
Mientras todos se alegraron de la victoria de Marc, quien se llevó los 5.000 euros de premio, la cara de Montse era todo un poema. La restauradora no se alegró por la victoria de su compañero. Incluso se apartó del resto y le costaba tomarse la fotografía de equipo.