Ernesto Ekaizer es un luchador incansable. Indestructible, también. A pesar de haber vuelto a ser ingresado en el hospital, después de más de 60 días por el maldito coronavirus e incluyendo un coma inducido por una neumonía bilateral, se mantiene activísimo y atento como siempre a la actualidad. Este nuevo tropiezo derivado de un sencillo resfriado, pero que ha hecho daño a sus pulmones inflamados por la covid, no lo parará ni le cambiará su buen humor. Además, la gente que le cuida y la ayuda a sanar está muy pendiente de hacerle la vida más fácil. Como tiene que ser.
Un buen ejemplo, la felicitación navideña que ha recibido este 24 de diciembre, la primera de una serie de jornadas especiales que se pasará encerrado y que llama "fiestas covidenyes": venía de parte del equipo de enfermería, con el que ha hecho mucha piña durante sus estancias en la Fundación Jiménez Díaz de Madrid. La firman las enfermeras, pero la que escribe se llama Margarita, y hace gala de un gran sentido del humor. Después de las clásicas felicitaciones y buenos deseos, le clava una "pulla" maravillosa y llena de afecto: "dentro de poco le meteremos en nómina por el tiempo que pasa con nosotros". Ernesto se lo ha tomado con humor, como tiene que ser, y lo ha compartido con sus seguidores y amigos, que viven pendientes de su estado de salud en la distancia.
Mis Fiestas Covideñas 2020...Feliz Navidad a todos con Salud y sin facilitar la Tercera Ola https://t.co/qaueasBlBl
— Ernesto Ekaizer (@ErnestoEkaizer) December 24, 2020
Mejor que el hospital se ahorre esta nómina, Ekaizer es mucho más útil y feliz haciendo su trabajo. Pero la oferta y la declaración de intenciones no está nada mal. Ya queda menos, maestro.