La pandemia del coronavirus hizo desaparecer uno de los elementos más característicos de los programas de televisión: el público en plató. Afortunadamente ya han vuelto a nuestras vidas. Hablamos de un sector de población realmente fascinante, y no lo decimos para mofarnos o menospreciarlos, ni mucho menos. Es gente apasionada, capaz de dejarlo todo para comerse horas y horas en un estudio a cambio de un bocadillo, una botella de agua, un viaje en autocar de ida y vuelta y, sobre todo, la fascinación de ver, oír y casi tocar a sus ídolos. Y si además de vez en cuando salen en pantalla, la felicidad es absoluta.

Aquellos que visitan las instalaciones de Telecinco a diario son verdaderos entusiastas. Hay quien enlaza 'El Programa de Ana Rosa' con un concurso de Cuatro y acaba la jornada en 'Sálvame', una proeza. Incluso los que repiten más de dos o tres veces por semana, trabajando más que algunos colaboradores. Se merecen un monumento. Obedientes, abnegados, pacientes e ilusionados. E inocentes. A veces, muy inocentes. Como la señora que ha ido esta tarde al programa de Jorge Javier Vázquez y que ha vivido un momento "tierra, trágame" mientras asistía al enfrentamiento a cara de perro entre Anabel Pantoja y Marta Riesco.

Anabel Pantoja, Marta Riesco y espectadora Sálvame Telecinco

Anabel Pantoja, Marta Riesco y la espectadora más famosa del día en 'Sálvame' / Telecinco

Esta mujer chupaba mucha cámara, porque estaba sentada en la grada justo detrás de la Pantoja. Y como la susodicha ha tenido una tarde caliente, pues ella también. Tenía que, como se dice en el argot, aguantar el plano, es decir: prestar toda su atención a las discusiones entre tertulianos, sin hacer aspavientos, ni susurrar con el de al lado, ni bostezar, rascarse o dormirse en directo. Mantenerse como una roca, vaya. Pero ella, como buena humana que es, también tiene sus necesidades. De la misma manera que los colaboradores se refrescan la garganta después de sus intervenciones, pues el público tiene sed. Se ha bajado la mascarilla cuando creía que nadie la miraba y ha bebido de su botellita de agua. Y ha ocurrido el desastre.

Espectadora Sálvame pillada Telecinco

Espectadora Sálvame mando cara Telecinco

Espectadora Sálvame alucinando Telecinco

La espectadora de 'Sálvame' pillada bebiendo agua y su reacción / Telecinco

El contenido era agua, pero por la reacción que ha tenido al darse cuenta de que estaba saliendo en antena parecía que estaba apurando una caña o un lingotazo. Se ha muerto de la vergüenza al descubrirse bebiendo con tantas ganas en uno de los monitores, pobrecita. La escena es delirante y muy divertida, todo un show. Ha acabado pidiendo perdón con las manos de angustiada que estaba. Lo que decíamos, un monumento.

Espectadora Sálvame pide perdón Telecinco

La espectadora de 'Sálvame' pidiendo perdón / Telecinco

Que no se sofoque nuestra nueva amiga. Ha sido lo mejor de la tarde. ¡Merece un abono de temporada pero ya!