La manifestación de la derecha española en la Plaza Colón de Madrid, aunque fue un bluf con respecto al número de asistentes, ha sido suficiente para cogerse a ella como un clavo ardiente más largo que algún paloselfie que aguantaba según qué bandera. La derecha -y la ultraderecha-, si algo cosa tiene, es un altavoz enorme para dar gato por liebre, y ni las escasas cifras harán desviar ni un milímetro su discurso.

Efe

Algunos VIPS hicieron acto de presencia en la plaza madrileña, como Carmen Lomana, Albert Castillón, Isabel Rábago, Toño Sanchís o Mario Vargas Llosa. Pero en contrapartida, hubo muchos que se quedaron en casa y que en las redes sociales promulgaron el #yonovoy. Personas como Wyoming, el actor Juan Diego Botto o la presentadora Eva Hache, que se ha llevado la palma a la hora de sulfurar a los excitados asistentes a la manifestación de Colón. El exjurado de God talent escribe en sus redes sociales que "Con vuestros ombligos tapáis el saber. Sólo os preocupa provocar y convencer a mentes pobres". Doble crítica sangrante: a los líderes políticos de PP, Cs y Vox por provocadores y manipuladores y a los que se dejan manipular, a los que tilda de mentes pobres. Pero lo que ha acabado de hacer verter el vaso de la bilis ha sido uno de los hashtags con que ha acompañado el comentario: #soisunosmierdas.

Reacción en cadena por parte de las masas derechosas afanándose por colocar una estatua de la presentadora justo en medio de la plaza de Colón donde defequen las palomas:

Excremiento, comemierda, alcohólica... La lista es interminable. Consecuencias funestas con respecto al seguimiento de sus futuros proyectos televisivos como por su bolsillo. Más de uno y de dos han exigido a la empresa Renault que fulmine su campaña publicitaria con la presentadora en cuestión:

Renault España

Veremos si la próxima vez que Eva Hache aparezca en algún programa la audiencia le vuelve la espalda y se va en masa a la competencia. Quizás Hache sale disparada en globo de la parrilla televisiva. O en Renault.