En Telecinco y Cuatro, las dos cadenas principales de Mediaset, se emiten tantos reality shows que hacen famosos todo tipo de personajes sin oficio ni beneficio más allá de las ganas de ser famoso. Algunos lo consiguen, como Sofia Suescun pero tenazas se quedan por el camino. Hay algunos de estos concursantes que son auténticos obsesionados con la fama, que recurren no uno sino más realitys. Es el caso de Álvaro, un chico de Málaga que fue candidato a encontrar novio en el reality Un príncipe para a Laura, y después fue a buscar pareja en First dates. Es ultraderechista, lo echaron de Vox y ahora está en la prisión por estafa. Es este
En Cuatro se definía como "Le encanta hacerse fotos cono los famosos" y en la noticia aparecida a El Confidencial lo definen como "el becario del Mocito Feliz". Era un pobre hombre desequilibrado que aparecía siempre detrás de los famosos cuando los entrevistaban en TV, con barba y gafas. Ahora este Àlvaro le tomó el relevo y hacía lo mismo, aparecía tras los famosos o como un friki el día de la Lotería de Navidad:
Con el paso del tiempo se ha dejado barba y se ha engordado pero sigue apareciendo a Telecinco, entrevistado en Así es la vida de Sandra Barneda. Ahora ya está en la prisión: "Fue detenido el 13 de septiembre por un delito de estafa. Desde entonces, pasa las noches encarcelado en la prisión de Alhaurin de la Torre. Se le responsabiliza de vender entradas falsas a eventos como el Benidorm Fest, acumulando más de 24 denuncias. A pesar de haber admitido su culpabilidad y haber reconocido públicamente su error, estafó más de 4.000 euros. Fue expulsado del partido VOX de Málaga tras realizar actos de índole sexual, ofreciendo 100 euros a cambio de tocar pies ajenos durante dos o tres minutos, así como difundiendo videos suyos masturbándose". Podófilo y estafador.
El chico malagueño ya fue condenado por estafa en el pasado "Utilizó una tarjeta bancaria ajena para pagar un viaje a Blablacar. La víctima se la prestó para abonar el desplazamiento, pero gastó mucho más dinero en otras compras: un portátil y un iPhone, prometiendo hacerse cargo de los pagos, los cuales nunca hizo, dejando una deuda de 3.429 euros. Por ello, fue condenado a un año de cárcel y a un abono de indemnización". Joyas de Telecinco. Las ha habido peores.