La que han montado Federico de Dinamarca y Genoveva Casanova. Ellos son los protagonistas del escándalo que sacude el panorama royal internacional, aunque no los únicos. Hay una coprotagonista que se ha encontrado el papel repentinamente sobre su mesilla de noche, y que tiene todos los motivos para sentirse humillada. Que un hombre poderoso, rico y casado aproveche el viaje de su mujer para coger un avión y hacerse un tour de restaurante-tablao-domicilio de una amiga y soltera de oro de la jet-set, qué quieres que te diga. En Dinamarca, en España y en Papúa Nueva Guinea, da igual, todo el mundo piensa en lo mismo. En una infidelidad. Evidentemente, la versión “oficial” no es esta, se quedan en lo de la amistad longeva, inocente y virginal. Susanna Griso decía ayer que “se conocen y tiene amigos en común. Suelen coincidir varias veces al año. Me dicen que son encuentros privados con más amigos del grupo, algunos miembros de la realeza. Quedan y duermen en casas privadas”.

Las fotos de 'Lecturas' abrían un melón dulce e irresistible para la maquinaria del cotilleo. La degustación es poco en poco, deleitándose con pequeños detalles como que Federico no llevaba maleta, pero se cambió tres veces de ropa en casa de Genoveva. Al abandonar el domicilio de madrugada, a escondidas y desorientado, sí que la portaba. Curioso. También hemos sabido que fue protegido por personal de la embajada, no por escoltas. Es decir, no había oficialidad en el viaje a Madrid. Es un futuro rey, no lo olviden. Todo es sospechoso, y la primera señalada es la mexicana: la acusan de avisar a los fotógrafos y de llevar al príncipe a locales donde podían ser retratados con facilidad. Pero resulta que a Federico no le ha cogido de nuevas, porque sabía que lo habían pillado aquel fin de semana de finales de octubre.

Federico y Genoveva / Lecturas

El digital 'Informalia' ofrece una información exclusiva y que destapa la verdad sobre la relación y la visita que ha hecho saltar todo para los aires. Un puñal para Mary Donaldson, la mujer y princesa australiana. “Llevan meses viéndose, la cita de Madrid no fue ni mucho menos la única. Eso del supuesto amigo de Federico que se contagió de covid y no pudo acompañarlos parece una excusa de mal pagador. Sobre todo porque el hijo de la reina Margarita habría viajado a la capital de España, pocos días antes de la visita oficial de Felipe y Letizia, “para encontrarse cara a cara con su amiga Genoveva Casanova con el propósito de decirle en persona que su 'amistad' debía terminar. Genoveva, al ser consciente de las intenciones del marido de Mary Donaldson, prefirió que la opinión pública conociera su relación con el futuro monarca danés”. Una traición por despecho.

Letizia, Felipe, Frederic y Mary Donaldson en Dinamarca / EFE

La información también ofrece la versión de la embajada de Dinamarca: el príncipe telefoneó a la ex de Cayetano Martínez de Irujo para tener más información. “Ella trató de paralizar la publicación del reportaje”, dijeron en el programa de la Griso, “pero la versión que nos llega en nosotros es que eso fue lo que ella le contó en él y que en realidad no movió un dedo. Había voluntad de que ese material fuera publicado y no retirado, y solo una cantidad que multiplicara por siete el precio las hubiera llevado en venderlo para que fuera guardado en un cajón”. Chantaje. La novela mejora por momentos. Esperamos ya el próximo capítulo.

Genoveva Casanova / RTVE.es