A pesar de la pátina de romanticismo que recubre todo lo que un foco alumbre para salir en cámara, es indispensable tener siempre en cuenta que la tele solo es un trabajo más. Eso, y que los famosos también son personas, que suena a topicazo, pero también entra en juego cuando nos enteramos de que, como cualquier ser humano, existe la posibilidad de que tengan problemas y desavenencias varias en el ámbito laboral. Si no nos creen, solo hace falta remitir a un caso tan ilustrativo como el de Alba Carrillo, uno de los rostros más todoterreno de Telecinco.

Alba Carrillo en Secret Story. / Telecinco

La madrileña saltó a la fama después de participar en Supermodelo en el 2007, pero fue a raíz de sus relaciones con figuras del star-system deportivo como el piloto Fonsi Nieto o el tenista Feliciano López que ganó más presencia en el mundo de la tertulia rosa y el entretenimiento. El rol de presentadora de Hable con ellas, el de invitada recurrente a las incontables variantes del extinto Sálvame y el de participante de formatos de telerrealidad tan célebres como Supervivientes Gran Hermano VIP figuran entre muchas otras cosas en su CV. Su último empleo fue como colaboradora habitual del Fresh de Ya es mediodía, y aunque quizás es su trabajo más longevo en la pequeña pantalla, cinco años después la despidieron de manera fulminante y sin previo aviso.

Alba Carrilo en Ya es mediodía. / Telecinco

Un movimiento previo a la pretensión de blanquear la antigua cadena amiga prescindiendo de los espacios más mamarrachos de la programación y fundamentado en el objetivo de renovar perfiles. La génesis de una guerra que sigue candente a través de la red, y es que los que hayan tenido el placer de ver a la hija de Lucía Pariente en acción ya podían augurar que no se iba a quedar callada. No van con ella, no es su estilo ni tiene intención de no sacar los trapos sucios a relucir. Hace tan solo unos meses, la televisiva creaba su propio canal de Twitch para emitir El salón de té y quedarse la mar de a gusto despotricando de todos los que han intentado acabar con su carrera en los medios de comunicación.

No solo arremetía contra Ana Rosa Quintana, jefa de Unicorn Content —la productora que prescindió de sus funciones en el primer trimestre del 2023—, a quien tildaba de "clasista", sino que también apuntaba hacia los despachos de los directivos. Lo que viene a ser no dejar títere con cabeza, pero es que la cosa sigue y sigue. Carrillo también ha publicado Lista para la vida, un libro en el que se abre como nunca y cuya promoción ha implicado entrevistas en infinitud de digitales. La última para El Confi TV, donde además de definir el nuevo TardeAR como un programa "casposo", recordaba su participación en los realities antes citados. Le preguntaban si se aventuraría a probar suerte en otros formatos y lo tiene claro: "Sí, en todos. Me encanta hacer cosas nuevas y por eso me gustan los retos".

Dicho y hecho. TVE la ha fichado para ser concursante de la nueva edición del programa de repostería Bake Off: Famosos al horno.

Alba se suma a una lista de concursantes en la que, hasta ahora, solo figura Terelu Campos de manera oficial. Extraoficialmente, se dice que también estará Rocío Carrasco. Tres míticas de Mediaset que se han pasado a la pública. Y eso que solo han pasado ocho meses del despido de la primera. Los estragos de un huracán organizativo que todavía remueve plantillas y parrillas.