Fue en agosto del 2019, tras varios años al frente del programa Zapeando, que el catalán Frank Blanco se despidió de la audiencia del espacio de La Sexta. Una marcha de la televisión, argumentó en su día, "inevitable" a la par que "sorprendente". Pues su intención, dijo, era jubilarse en el formato de sobremesa para marcarse un Jordi Hurtado. Casi un año después, en junio del 2020, regresó a la pequeña pantalla. Lo hizo en otra cadena, Televisión Española, para presentar el espacio Typical Spanish. Un formato de entretenimiento que terminó en agosto del mismo año y que la empresa pública no renovó. A día de hoy Frank trabaja en Radio Marca donde presenta un programa multiplataforma, Marca Gaming Show, que gira entorno a las novedades relacionadas con el mundo de los videojuegos. Y lo hace con una imagen de lo más sorprendente. Pues Frank ha cambiado mucho en los últimos meses. Ver para creer. Antes era así:
Ha sido a través de sus redes sociales, su cuenta de Instagram, donde el de Mollet del Vallés, Barcelona, ha presumido de lo muy cambiado que está. Nada tiene que ver con la imagen que lucía cuando trabajaba en el programa de La Sexta, Zapeando. El catalán ahora está mucho más delgado y presume de una cara mucho más fina, luminosa y rejuvenecida. Como si se hubiese quitado muchos años de encima. Un favorecedor y llamativo cambio con el que está irreconocible. El nuevo Frank Blanco, a continuación:
De hecho, tal es la transformación que el presentador ha experimentado que incluso alguno de sus seguidores se ha mostrado preocupado por su importante bajada de peso. "Hace más bulto ella qué tú, come más, amigo", le han escrito en referencia a la fotografía en la que sale junto a la cómica Paula Púa. Un radical antes y después que sirve para darnos cuenta que Frank Blanco lleva mucho tiempo sin aparecer delante de las cámaras. ¿Para cuando su vuelta a los platós de televisión? Esperamos que pronto.