A María Teresa Campos le han montado su propio funeral. Anticipado, eso sí, por mucho que algunos jueguen a matarla. El funeral es sólo televisivo, en 'El cielo puede esperar' y los interesados lo podrán ver en Movistar#0 el próximo 13 de enero. Allí veremos a sus hijas, Terelu y Carmen Borrego, al cronista real Jaime Peñafiel, la tonadillera María del Monte o la presentadora Toñi Moreno, encargada (por segunda vez) de comunicar la supuesta defunción de la estrella televisiva. La lista de invitados es larga, incluyendo a una persona muy amada por la Campos... hasta hace unos pocos días. Se trata de Edmundo 'Bigote' Arrocet, el humorista y cantante con el que ha protagonizado una abrupta y polémica ruptura sentimental que llena horas de chismorreo televisivo.
El programa, grabado hace semanas, contó con el círculo más próximo de la comunicadora, ajeno al terremoto emocional que ha trastornado su mundo. Se comenta que el de Buenos Aires la dejó por Whatsapp, porque es un "espíritu libre" que no podía estar "encerrado" en una relación. De hecho, estos días estamos viendo como a Edmundo le crecen las novias extraoficiales como setas, la Campos se desahoga en las revistas y las hijas filtran informaciones sobre la caradura del cómico, a quien se acusa de practicar aquello de "por el interés te quiero... Teresa". Pues bien, el espíritu libre de Arrocet canta, baila y pronuncia un discurso durante el programa dirigido al espíritu de su expareja, con la que ha compartido 6 años de vida. A buen seguro que la Campos se ha arrepentido de participar en el espacio, sobre todo por ver allí al hombre que le ha roto el corazón.
Son las cosas que pasan por jugar a hacer espectáculo con la propia muerte. Las sorpresas pueden no ser muy agradables. En todo caso, los guionistas han visto cómo se les abrían las puertas del cielo. En el caso de la Campos, sin embargo, más bien le recuerdan al infierno del desamor.