Finalmente, el esperpento se consumó. La previa del España-Kosovo venía calentita. Que si Territorio de Kosovo, que si Federación de Fútbol de Kosovo, que si no mostrar la bandera de aquel país, que si ir a publicidad cuando sonara su himno... En TVE casi les explota la cabeza cuando supieron las filigranas torpes que tendrían que decir Juan Carlos Rivero y Chapi Ferrer por no mencionar a Kosovo por su nombre. Afortunadamente, personas como Quim Monzó giraron la tortilla de manera sublime en la previa del partido.
España no lo reconoce como país. Y hacerlo, sería un precedente que no se quieren ni imaginar con Catalunya. En Kosovo estaban que trinaban y amenazaban con largarse del estadio si continuaba el menosprecio. Finalmente hubo himno. Pero TVE sorprendió con una decisión grotesca de país pequeño y acomplejado, de país de pandereta que cree que su tamaño es proporcional... a las letras que utilice para anunciar el marcador de un partido.
Patetismo en estado máximo. ¿Qué hacer para despreciar a Kosovo? Poner sus siglas más pequeñas que las de España, y en minúscula. Nos imaginamos la escena en Prado del Rey: "Se van a enterar esos kosovares... Las vamos a poner su nombre en minúscula, toma ya!!!. Un esperpento. Y la red, destrozándolos sin piedad:
Especialmente sangrante ha sido el diputado de ERC Gabriel Rufián, que ha hecho tres tuits que han corrido como la pólvora, sulfurando a las Españas más hiperventiladas:
Al-Andalus, Democracia Plena y M.Kosovo... Brillante. Ganas de ver el Kosovo - España, a ver cuál una se piensan en TVE. Perdón, en tve.