Gemma Nierga ha vuelto a TV3 por la puerta grande. Desde hace unas semanas presenta con mucho éxito el programa Els meus pares, donde conversa con los progenitores de personajes muy conocidos para saber qué hay tras la fama y tras la imagen pública de todos ellos. Charlando con Nierga, uno se da cuenta de que el talante y el carácter de personas como Andreu Buenafuente, Bruno Oro o Xavi Hernández viene de genes, y que los padres y madres de cada uno de ellos tuvo mucho que ver.
La periodista empatiza con los padres porque sabe escuchar, sabe emocionarse y sabe decir la palabra justa en el momento oportuno. Virtudes que también podrán disfrutar los espectadores de Televisión de Catalunya el próximo 16 de diciembre, en la tradicional La Marató de TV3, que este año va dedicada al cáncer, y que Nierga presentará acompañada de Ramon Gener en la versión televisiva y de Roger Escapa en la versión radiofónica en Catalunya Ràdio.
Precisamente en la emisora pública catalana Nierga ha estado el domingo en el programa Revolució 4.0, presentado por Xantal Llavina. Con ella Nierga se ha sincerado, ha abierto el corazón y ha profundizado en una cuestión íntima. Antes, sin embargo, fue muy curioso saber la opinión que tenía la presentadora Els meus pares, precisamente, de los suegros de la periodista que la estaba entrevistando. Xantal Llavina es la pareja de Quim Masferrer, el popular El foraster, por lo tanto, cuando Gemma fue a conocer a los padres del presentador, también estaba conociendo a los suegros de Llavina: "A los dos segundos ya estaba tranquila. En el comedor ya empecé a ver fotos tuyas, tu niña... Acabamos emocionados, se me saltaban las lágrimas".
Un tono próximo que continuó cuando Llavina le preguntó: "¿Cuáles son las cuatro personas que más quieres?", y Nierga le respondió "mis hijos Pau y Arnau, mi marido y mi padre. Pero tengo que decir más de cuatro, también pongo a mis hermanos, mi sobrino Miquel... mi familia". ¿Y quien se puso al teléfono? Mariano Nierga, padre de Gemma. "¡Papa! Suerte que te he mencionado, ¿eh, papa? Porque no sabía que te llamarían. Imagina que me olvido!". Un momento simpático y emotivo, al oír al padre diciendo que se emociona con lo que hace la hija y el tipo de programa que presenta.
En la conversación posterior con Llavina, precisamente incidiendo en La Marató que presentará de aquí a un par de meses en TV3, Nierga incidió sobre lo que En Blau ya se hizo eco hace unos días, la muerte de su sobrino de tres años de cáncer. Una revelación que ya apuntó en el programa de TV3 Al cotxe y que ahora ha profundizado: "tristemente, el cáncer es una enfermedad que todos sufrimos alrededor, todos tenemos gente próxima que han estado enfermos o han muerto. A mí me toca especialmente, y aquel día me tendré que tomar una pastilla para aguantar y no emocionarme". No es extraño, habiéndole pasado lo que le pasó. "Lo de mi sobrino fue muy duro, porque Daniel tenía tres años. Era el primero nieto, el primer sobrino, el primero todo. Era mi ahijado. Un día le encontraron un bulto y el médico nos dijo: 'es un cáncer. El niño morirá'. Estuvimos un año luchando y pensando que sobreviviría, pero efectivamente, murió al cabo de un año. Yo no soy creyente, e incluso me iba a rezar. Por suerte ya no me echo a llorar después de tantos años". Puedes escuchar la entrevista cliqueando en la foto:
La experiencia fue tan dura que Nierga no ha podido volver nunca más al Hospital de la Vall d'Hebron por los recuerdos que le vienen a la cabeza.