Preparen las palomitas, el show está a punto de empezar. Georgina Rodríguez ha dado un paso decisivo y ha abierto una causa judicial contra una persona de su pasado. Persona y personaje, para ser más exactos. Se trata de un excompañero de trabajo que se ha hecho tiktoker y ha encontrado la gallina de los huevos de oro poniéndola a parir: hace un par de meses se marcaba una trilogía tildándola de interesada: "Siempre estuvo buscando pegar el pelotazo. Se movía en ambientes de mucho dinero pero vivía en un apartamento muy pobre. Cuando conoció a Cristiano fue su oportunidad". Incluso explicaba la, según él, auténtica versión de cómo fue el match con el portugués: "A ese tipo de clientes solo los atienden los responsables de la tienda. Georgina estaba atendiendo a otra clienta y quería llamar su atención hasta que hubo una mirada. No hablaron pero a las semanas coincidieron en otra fiesta y ahí intimaron".
El autor de estas palabras es un tal Pablo Bone, que las justificaba con el clásico 'estoy contando experiencia'. Podría ser uno de tantos testimonios que ponen sobre la mesa el pasado de Gio, muchos de ellos más atrevidos que Pablo. Sin embargo, parece que el tipo ha apretado la tecla equivocada y provocado la cólera de Rodríguez, que ha levantado el teléfono y ha enviado a sus abogados para cerrarle la boca. ¿Cómo? A través de una demanda por difamación, calumnias y vulneración al derecho a la propia imagen. A Bone se le puede caer el pelo, el bótox de los pómulos y la extraña sonrisa que dibuja. Pero sigue igual, incluso feliz por haber recibido la citación y tener algo sobre la que hacer más vídeos.
Georgina contra el tiktoker Pablo Bone, el combate que nos merecemos
Si este conflicto acaba llegando a una sala de vistas los letrados y personal de Justicia que aquel día tengan que trabajar se lo pasarán de coña. Sí, porque el tal Pablo se tragó el circo entero hace tiempo. Tengan en cuenta detalles como que asegura que está liado con un poderoso jeque árabe con quien se casará pronto; vaya, que es como el sombrero de un mago, siempre salen sorpresas y cosas raras. Sorprende que Georgina quiera ir más lejos y darle cuartelillo, le puede más la sed de venganza que la razón. El demandado está inundando su cuenta con nuevos vídeos; por ejemplo el que explica cómo "la mano negra portuguesa" está haciéndole la vida imposible desde hace tiempo. Lo acusa, agárrense a la silla, de haber exigido a Telemadrid eliminar un trozo del programa 'Madrileños por el mundo' en el que salía él desembuchando sobre la famosa pareja. ¿Pablo, hijo, quizás que este no era el tema? Vaya, por ayudar a que lo entiendas, nada más.
"La mano negra portuguesa" contra el excompañero de trabajo de Gio, los abogados se frotan las manos
Pues no. El hombre está convencido en la estrategia enfermiza de los CR7 y Gio contra él, y no parará. Incluso llegando a contradecirse a sí mismo y cavando un poco más su tumba: lo que explicaba de 'cómo conocío Cristiano a Georgina' ya no está vigente, ahora habla del "oscuro pasado" de la aragonesa. Que trabajaba en una conocida discoteca de Madrid, primero poniendo copas y después siendo "chica de imagen", especialista en 'animar' fiestas de futbolistas. Una de ellas la pagó el entonces delantero del Real Madrid, y allí cuajó la cosa. Por eso, asegura, la enchufaron en tiendas de ropa de lujo, para blanquear su procedencia. Si tienen tiempo y ganas de reír, Pablo es su hombre.
¿Hemos empezado hablando de palomitas? No, nos quedaremos cortos. Necesitaremos toda la tienda de golosinas.