Finalmente, después de 14 años, Gerard Piqué ha dado las claves por las cuales la selección española consiguió ganar el Mundial de fútbol de Sudáfrica 2010. Una cita que al central catalán le provoca buenos recuerdos, a nivel profesional y personal, ya que allí fue cuando empezó su historia con Shakira, que cantaba la canción oficial, el Waka Waka. En clave deportiva, la Roja conseguía su primer título, su primera estrella encima del escudo, después de una final ganada, lo recordarán, en la prórroga, cuándo quedaba poco para el final del partido y los penaltis, con el gol de Andrés Iniesta imposible de olvidar para aquella generación de jugadores.
Aquella fue una selección repleta de jugadores del Barça, como Piqué, Iniesta, Xavi, Busquets o Puyol, y donde también había dos porteros como Íker Casillas y Pepe Reina. Dos nombres propios que han vuelto a escena cuando el exjugador azulgrana estaba charlando con Ibai Llanos y han recordado aquel Mundial y aquella final. El catalán ha recordado qué pasó en la previa de aquel trascendental partido, qué pasó en las habitaciones antes de la primera final de la historia de la selección española y la posterior victoria. Tal como dice al mismo Piqué, "ahora ya se puede decir porque ya ha pasado". Ha prescrito el crimen, que podríamos decir. ¿Cuál? Un atentado a los nutricionistas y preparadores físicos, una costumbre y una puesta en escena que haría remover a Vicente del Bosque si se llega a enterar la noche antes del partido.
Un hábito peculiar que llevaban a términos los futbolistas top de la selección española para afrontar en forma la final... vaya, como si fueran preadolescentes llegados a casa muertos de hambre a la hora de la merienda: "Nosotros teníamos una rutina que era: el día antes del partido, y lo hicimos en la final del Mundial, nos metíamos croissanes de chocolate..., pero que había alguno que metía hat-trick de croissans de chocolate, con Colacao, el día antes por la noche.... ¡Una bomba, pero una bomba a otro nivel! Y nos quedábamos hablando". Como él dice, "cualquier nutricionista te diría: '¿dónde vas? Si eres profesional no puedes comer esto'... pero la dinámica, el ambiente que había, (David) Villa explicando sus historias, dos horas ahí como equipo...". Llanos quiere saber si todo el mundo participaba de esta costumbre y Piqué reconoce que "el 80 %... Casillas estaba ahí metido también en el ajo... Pepe Reina, hat-trick cada día".
Desde aquel Mundial, España nada de nada, ningún título, ni entre los cuatro primeros... Quizás para que vuelvan a levantar la Copa hace falta que vuelvan los croissants de chocolate a la concentración de la Roja... O hace falta que vuelva Gerard Piqué.