La vida de Gerard Piqué parece una atracción de Port Aventura. Después de convertirse en uno de los mejores defensas de la historia del fútbol, su papel como deportista se desvaneció rápidamente y, casi, para sorpresa de todo el mundo. El peso que tenía en el equipo cayó completamente y paralelamente subió su posición en el foco mediático. Su nombre y el de Shakira han ido acompañando a todos los titulares en cada canción que ha publicado la cantante. Una joven silueta emergía por encima de todas las otras: Clara Chía. Su actual pareja ha sido la encargada de sacar su lado más romántico y, también, la principal razón para que el exazulgrana no fuera tan constante en las redes sociales. Toda la figura que había construido a partir de tweets, imágenes y comentarios polémicos acabó cuando se empezaron a popularizar los nombres: Twingo, Casio, Rolex...
Sus seguidores echan de menos sus publicaciones llevadas por el azar, los selfies que no entendía nadie o los tweets contra Javier Tebas. Ahora, el Instagram de Gerard Piqué parece el de un exfutbolista cualquiera, sin demasiadas publicaciones, habiéndose marchado de la rutina de alimentar a los seguidores a base de fútbol. Gerard Piqué no es así o al menos no lo era. A él le gusta el caos, le aburre la tranquilidad de una cuenta sin publicaciones. Siempre ha disfrutado de tirar piedras y en lugar de esconder la mano poner el pecho. A pesar de estar acostumbrado a sentirse cómodo en el ojo del huracán, ahora prefiere guardarse las experiencias para él y el pequeño círculo que lo rodea. En gran parte para la tranquilidad de Clara Chía y porque sabe que como se complique más de lo habitual, volverá a ser la musa de una nueva canción de Shakira.
De hecho, mientras la colombiana baila en el coche con sus amigas cantando "se pasa rico soltera", él se muestra a la red en una situación completamente contraria. En un viaje a Abu Dhabi para ver un partido de la NBA, Gerard Piqué aprovechó para hacer turismo al país asiático. El exjugador quiso enseñar en una publicación el tiempo que había compartido con algunas estrellas del fútbol, pero escondido, en una imagen interior, nos encontramos una nueva instantánea junto con su pareja. En ella aparecen los dos de espalda contemplando el Gelb-rot-blau de Vassily Kandinsky. La tranquilidad de observar una obra de arte en un museo refleja la relación actual que tienen los dos. Después de estar constantemente en el foco mediático, ahora descansan detrás de todas las miradas. Su nombre tan solo se recuerda cuando la Kings League llega en otro país o cuando Shakira decide sacar otra canción.
La figura de en Gerard Piqué ha cambiado en los últimos tiempos. Cuando hace un año hubiera publicado la fotografía en primer plano para ver el mundo arder, ahora la incorpora entre el encuentro con bastantes estrellas de fútbol. Ronaldinho y Henry se llevan toda la atención, mientras que detrás se esconde una de las pocas publicaciones que ha colgado con ella. A pesar de la idea de hacerlo pasar desapercibido, la red lo ha detectado rápidamente y le ha dedicado bastantes comentarios irónicos sobre su relación. El empresario es una estrella mundial y él lo sabe. Deja rastro allí dónde pasa y sino que le pregunten a Shakira. Por suerte, la colombiana no se ha quedado callada y nos han brindado unos episodios dignos de una telenovela.