Hijos de padres separados, un drama que solo conocen los que lo han sufrido. Cada familia infeliz lo es a su manera, y los Piqué - Mebarak son infelices a la altura de su fama. Shakira ha decidido hacer de su animadversión a Gerard Piqué un modus vivendi. Canta contra Piqué, negocia contra Piqué y actúa contra Piqué. En el caso de los hijos, son la parte más vulnerable. Los coló en un videoclip sin que su padre supiera nada, haciendo que los niños de 8 y 10 años se lo ocultaran. Se niega a permitir que los niños, Milan y Sasha, vayan a la boda de su tío Marc Piqué por San Juan ya que no les toca con su padre. Y así cada día. Piqué no dice nunca nada: ni habla, ni canta, ni se niega a nada. Dejó que los niños se marcharan eaMiami "Querer es dejar ir" cuando nada lo obligaba a hacerlo y ahora hace el trabajo de la hormiga: ganarse a los niños a cada gesto, a cada tiempo que le toca pasar con ellos.

Piqué besa a Sasha GTRES

Gerard Piqué está estos días en Barcelona volcado en sus hijos y sin Clara Chía. Será por una imposición de Shakira en el acuerdo de separación o por cautela, pero Clara no comparte ni un minuto con los niños. Y es evidente que cuando Milan y Sasha viven en Barcelona lo hacen en el tríplex de lujo de la calle Muntaner con su padre. Gerard Piqué ha querido hacer un regalo al hijo pequeño mientras pasa la primera parte del periodo de vacaciones en Barcelona. En Miami ya no hay escuela pero en Barcelona, sí. Y Piqué ha acompañado a Sasha a su antigua escuela, la Escuela Norteamericana de la zona alta de Barcelona. Allí el niño ha podido verse con los que eran sus compañeros hasta hace dos meses. Una alegría que han grabado las cámaras de Europa Press. El imponente Range Rover negro de Piqué aparca delante de la escuela y Sasha baja con camiseta sin mangas corriendo hacia su ex clase, muy emocionado:

Sasha Piqué corre, Antena 3
Sasha Piqué vuelve al cole, Antena 3

El padre sabe que en Barcelona tiene muchos ases en la manga, es el lugar donde los niños han nacido, crecido y sido felices. Aquí tienen a su familia paterna, los amigos y el entorno que les es familiar. Una cosa que nunca les podrá dar Shakira a los EE.UU., el calor de los primeros años de infancia. Todos los recuerdos que tienen son de Barcelona. Dos niños catalanes viviendo en Miami por una sola razón: porque su madre no soporta estar cerca de su ex ni de la familia de su ex. La distancia de los niños hace volver a pensar por qué razón Piqué cedió y permitió lo que la ley no le obligaba: que dos menores abandonaran el arraigo familiar para acabar en una ciudad extraña, Miami, sin los abuelos maternos, enfermos han vuelto a Colombia, y con Shakira buscando novio entre estrellas del deporte o de Hollywood. Ningún juez le habría dado la custodia exclusiva a Shakira pero Piqué cedió.

Piqué llora dejando marcharse a los niños, EFE

Piqué se sintió culpable, él había engañado a Shakira con otras mujeres, él hizo que la colombiana se instalara en Barcelona para formar una familia, esta vida en la ciudad por la cual Hacienda pide años de prisión a Shakira, paor no pagar. Y la colombiana se quejaba de no tener vida social o de estar sola cuando Piqué viajaba cada semana un par de vuelos con el Barça. Y Piqué cedió. Los niños en Miami. Ahora, cuando ve la cara de su hijo de 8 años que muere por una hora con sus examigos, o cuando ve que Shakira prohíbe a Milan y Sasha ir a la boda de su querido tío Marc, Piqué sabe que se equivocó. No tendría que haber dejado que Shakira se los llevara.