TV3 ha hecho una apuesta por Gerard Piqué, que no frecuenta nada los magazines de entrevistas de la casa, que matarían por tenerlo de invitado Quizás para cambiar eso, el canal Esport 3 dedicó toda la tarde-noche del sábado, entre las 7 y las 11, a la competición de fútbol organizada por Kosmos, la empresa de Piqué. En directo las dos semifinales y la final de la Kingdom Cup que se jugaron en el Palau Sant Jordi. Piqué salió poco. Con chaqueta de piel negra, gorra y muy juvenil. Entregando uno de los premios y poca cosa más. Piqué vendió los derechos de emisión a TV3 y a Telecinco al mismo tiempo. En la TV estatal sí habló:
Mediaset lo pasó en su segunda cadena Cuatro, donde solo emitieron la final y pinchó de audiencia, un 3,8%. Piqué decidió hablar pero no en TV3 sino en el programa El Desmarque. A pesar de ser un programa de Telecinco no le preguntaron por sus dos hijos Milan y Sasha que estaban presentes en el acontecimiento deportivo que organizaba su padre. Piqué le clavó así una nueva bofetada a la madre de los niños, Shakira. Mientras la colombiana exhibió en los Grammy Latín a las dos criaturas de 8 y 10 años por sus negocios, en la alfombra roja, en primera fila de platea y l en eescenario durante la actuación donde los dos niños cantan, Piqué ni los enseñó en ninguna de las dos teles que retransmitían su negocio. Dan audiencia pero Piqué no quiso exhibirlos. Como tampoco apareció Clara Chía excepto su nombre en los títulos de crédito como una empleada más de Kosmos. Estuvo allí pero no apareció en TV. Uno de los espectadores del Sant Jordi grabó a los hijos de Piqué dando saltos en el palco. Vídeo de la izquierda:
Mientras Piqué los esconde, Shakira utiliza a sus hijos como un ventrílocuo saca a sus muñecos. Más feo fue citarlos cuando confesó que delinquió en el comunicado de la colombiana donde justifica pactar con la fiscalía y admitir que defraudó a Hacienda y dice que "lo hace por los niños". Mire, no. Un pacto aceptando los delitos es lo que es: pagar muchos millones para apagar el fuego, el peligro de prisión y la mala imagen de un juicio donde se habrían expuesto sus miserias. Los niños no pintan nada. Ni habían nacido cuando se cometieron los hechos. Pacta porque puede: solo le cuesta dinero. Y de eso, a Shakira le sobra.