El choque de trenes ha llegado. Pero también a la televisión. De la lucha entre Masterchef Celebrity y GH Revolution el primer vencido es el teatro catalán. Los dos titanes de la televisión dejaron a TV3 y su "Catalunya aixeca el teló" en un reducido 5,7% de share. 153 mil espectadores que llenarían muchas plateas pero en el prime-time televisivo de una gran cadena son poca cosa. La gran gala del teatro catalán conducida este año por Roger Coma se ha decidido emitir en diferido ...una semana después! Parece como si a la televisión le estorbara.
La audiencia catalana se ha comportado exactamente igual que la española: líder Masterchef y 2 puntos por debajo de GH (15,5 versus 13,7). Eso no demuestra una voluntad de evadirse del relato político. Nadie quiere perderse lo que Está pasando. Precisamente, el programa de Toni Soler recuperó el liderazgo con un 12,7% y los dos Telenotícies hicieron datos espectaculares: 23,3% el de Raquel Sans y 19,1 el de Toni Cruanyes. Incluso la tertulia Més 3/24 hizo sombra a la gala teatral con un 4,3%. Este programa de Xavier Grasset que Sant Joan Despí se inventó para competir con la tertulia política de Cuní consiguió finalmente superar al 8 al dia de Jordi Armenteras, que se quedó en un 3,5%.
Ya que va de cocina, hay dos platos que se están quemando al horno: A tota pantalla de Nuria Roca está a punto de sufrir el efecto Tarda oberta: sacarlo de los fogones y revisar la receta. El miércoles ya no se emitió por la actualidad política pero es que el día anterior bajó a un preocupante 3,5% durante 3 horas. El hecho de que también se viera superado para el canal 3/24 indica que quizás funcionará cuando baje el souflé político. El otro programa nuevo que está envejeciendo demasiado rápido es el Catalunya directe de Quim Morales: hizo un desastroso 0,5%, superado incluso por la repetición del programa de vistas aéreas Déu n'hi dronque la cadena del Grupo Godó ha repescado del baúl. El culebrón pone más pimienta y suma adeptos, Com si fos ahir alcanza su mejor dato con un 16,1%. Mientras tanto Vador Lladó y Ruth Jiménez necesitan nuevos ingredientes para superar un insípido 8,2%. Que les aproveche