Justo una semana después de la Diada, justo una semana después del 11 de septiembre, la plana mayor del españolismo desembarca en Barcelona por el 25% de castellano. Abascal, Arrimadas y el padre de Canet de Mar asisten a la manifestación de este domingo, a priori, en defensa del castellano. Pero tal como dijo Pilar Rahola en su canal de YouTube, "nos benden la película de que estamos ante una manifestación por los derechos de los niños, por el idioma castellano que parece que sería 'minorizado' o 'perseguido' o 'menospreciado'... y que por lo tanto se trata exclusivamente de unos derechos fundamentales de unos ciudadanos castellanohablantes que quieren que sus hijos estudien en castellano... Es mentira. Tiene que ver con lo que hace 300 años que intentan: el ataque persistente y permanente contra el catalán está exclusivamente pensado para destruir la identidad catalana, la base de la nación catalana".
Veremos qué datos se dan de asistencia este domingo en las calles de Barcelona. Sus organizadores seguro que hablan de éxito. Pero la realidad es que la cosa ha sido un fracaso: 2.800 personas según la Guardia Urbana. Lejos, pues, de la protesta que en diciembre del año pasado reunió, cerca del Arco del Triunfo, a 35.000 personas que reclamaban el blindaje del catalán en la escuela enfrente de las ofensivas de los tribunales para acabar con la inmersión lingüística, sólo unas semanas después de que el Tribunal Supremo obligara a los centros a impartir un 25% de clases en castellano. Bajo el lema 'Español, lengua vehicular', la entidad Escuela de Todos pretende reunir al españolismo en las calles de la ciudad para "reclamar la igualdad de los derechos lingüísticos de los alumnos catalanes a los cuales desde hace más de treinta años se ve vulnerados por prácticas políticas discriminatorias". Y hasta allí que ha ido el 324 en una de sus conexiones para los informativos. Concretamente, el boletín presentado por Óscar Armengol a la una del mediodía.
Conecta con la compañera Deidré Dalmau, que justo después de que le dé paso en el Arco del Triunfo, en medio de la manifestación, y con carteles detrás de 'Tenemos derecho a una educación en español', le responde a Armengol "lo intentaremos" cuando le pregunta sobre qué han dicho los líderes políticos. Probablemente lo haya dicho porque enseguida han empezado a ponerle una bandera rojigualda por delante de su cara. O por la presencia de uno de los manifestantes, que ven a la derecha de la imagen, gafas oscuras, camiseta amarilla y cogiendo un palo con una bandera de España. Mientras la reportera intenta hacer su trabajo, el hombre continúa plantado allí delante, con actitud de perdonavidas y enfrentándose con otros manifestantes que querían que saliera de allí y no la liara. Y él, chulesco: "Que no me empuje el tío este", dice, mientras el resto le emplaza a que se marchara: "Fuera, fuera, eso es lo que le están grabando. Mal, muy mal, has hecho un flaco favor". ¿A qué se refieren? Al hecho de que el manifestante ha cogido la bandera y le ha dado un golpe a la cámara de TV3, como se ve en esta secuencia. Cliquea en la última foto para ver el momento (a partir de las 13h 13':)
Tenemos derecho a una educación en español, pregonan los carteles... Mucha educación no ha demostrado este hombre de amarillo, ni en español ni en ningún otro idioma.