La ciudad de Valladollid se vestía de gala para recibir al gremio del cine y la interpretación en una de las noches más especiales del año para la cultura del país, los Premios Goya. La 38.ª edición llegaba con fuerza y mucho nivel ante las expectaciones de los nominados. Una gala presentada por la mítica figura del cine español Ana Belén y por la pareja que define el mundo audiovisual actual, Los Javis. Entre los preferidos de la noche, el nuevo filme del catalán J.A Bayona era el principal candidato a llevarse la mayoría de estatuas, contaba con trece nombramientos y, tal como se auguraba, el proyecto del trágico accidente arrasó entre el resto de candidatos. Personajes célebres, actuaciones, reivindicaciones y una gran presencia del sello catalán, definieron la noche anual del cine español.

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La dulzura de Amaia y la efusividad de David Bisbal abrían el espectáculo que, marcado por un ritmo ligero y uno tan monótono que pronto empezaría la entrega de los premios de la noche. "La sociedad de la nieve" el proyecto de Netflix y Juan Antonio Bayona triunfaba en cada uno de los nombramientos. Desde el inicio de la noche, el famoso director español no pudo para de enjugarse las lágrimas cada vez que honraban a alguien del equipo. Se llevó doce premios en total, entre los cuales recogió el galardón a mejor película y mejor dirección, además de actor revelación y casi una decena de galardones técnicos sobre el proyecto. Jota Bayona conmocionaba a todo el público con su discurso sobre la cultura española y la dura experiencia en el panorama internacional: "Como español, cuando estoy fuera, tengo que picar al doble de fuerte, y cuando vengo aquí parece que estoy en otra liga; pero yo pertenezco y creo en el cine español" aseguraba entre lágrimas el famoso director.

Una ceremonia marcada por las reivindicaciones contra la violencia machista y también al honrar y recordar en todas las figuras del mundo de la interpretación que nos han dejado durante el año. Ana Belén y Los Javis protagonizaban en directo un espectáculo dedicado a Concha Velasco, interpretando el mítico "Mamá, quiero ser artista" y "Una Chica Yeye". Entre el resto de galardones de honor, el director más premiado de la noche era el encargado de entregar al Goya Internacional en una de las actrices más famosas de Hollywood Sigourney Weaver. La neoyorquina ha grabado hasta seis películas aquí en España y ha participado en múltiples filmes internacionales como Alien o Gorilas en la niebla. Emocionada, agradecía su premio, pero sobre todo recordaba conmocionada, uno de los principales motivos de su éxito en España. El característico doblaje que la hizo conquistar España.

Weaver se animaba a formar grande parte del discurso en español, o, mejor dicho, con "catanyol", catalán y español. La estadounidense agradecía con uno tímido "gràcies" a Jota Bayona y a continuación, explicaba el siguiente: "Mi amigo Bill Murray me dice que mi interpretación es mucho mejor cuando me doblan al español. Así que realmente la actriz que me dobla tendría que estar aquí arriba conmigo, ella es Maria Lluisa Solà, gracias" El público la ovacionaba y la red conmemoraba sus palabras en honor en una de las figuras catalanas más importantes del doblaje. Sigourney Weaver, simplemente maravillosa.

Unos clásicos premios Goya con un regusto de lo más catalán.