"Terminator", dirigida por James Cameron y estrenada en 1984, es indudablemente un clásico del cine de acción y ciencia ficción. La película no sólo impulsó la carrera de James Cameron como uno de los directores más influyentes de Hollywood, sino que también cimentó a Arnold Schwarzenegger como una superestrella del cine. La trama de "Terminator", con su mezcla de acción trepidante, conceptos de viaje en el tiempo y un antagonista casi indestructible, se ha convertido en una parte integral de la cultura popular. Sin embargo, detrás de las cámaras, hubo algunas anécdotas curiosas, una de las cuales involucra una petición inusual de Arnold Schwarzenegger.
Arnold Schwarzenegger quería beber y se lo hizo saber a James Cameron
Arnold Schwarzenegger interpretó al icónico personaje del Terminator, una máquina asesina enviada desde el futuro, pero lo verdaderamente interesante aquí es que el actor hizo una sugerencia bastante peculiar durante la producción de la película. Arnold Schwarzenegger, el cual también es conocido por su carisma y sentido del humor, propuso a James Cameron una escena en la que el Terminator se bebiera una cerveza en el apartamento de Sarah Connor en la película. En la idea del actor, su personaje después actuaría como un borracho, trastabillando y comportándose de manera errática.
Sin embargo, aunque suene cómico, la petición de Arnold Schwarzenegger fue rápidamente rechazada por James Cameron. La razón principal del director para negarse a incluir esta escena fue que consideraba la idea completamente ridícula, algo que en parte es cierto, pues tenía sus razones, pues el Terminator, después de todo, es una máquina de matar enviada del futuro, programada para ejecutar su misión con precisión y eficiencia inquebrantables. La idea de una máquina altamente sofisticada comportándose como un borracho iba en contra de la naturaleza fría y calculadora del personaje. Para James Cameron, mantener la coherencia y la seriedad del Terminator era crucial para la integridad de la historia.
James Cameron no aceptó la petición del protagonista de su película por nada del mundo
El rechazo de James Cameron a la idea propuesta por Arnold Schwarzenegger también denota su enfoque meticuloso y su compromiso con la lógica interna de la historia, algo digno de un director de primera. James Cameron entendía que la fuerza de "Terminator" radicaba en la amenaza implacable y seria que representaba el personaje de Arnold Schwarzenegger, por lo que introducir elementos humorísticos como una escena de borrachera habría diluido la tensión y el peligro que el Terminator debía encarnar.
A pesar de esta propuesta descartada, la colaboración entre James Cameron y Arnold Schwarzenegger fue extremadamente fructífera. El actor aportó una presencia física imponente y una actuación minimalista pero eficaz que se convirtió en sinónimo del Terminator, y esto era lo que quería el director, aún más que ver al protagonista borracho.
El legado de "Terminator" se ha extendido a lo largo de décadas, dando lugar a una franquicia que incluye varias secuelas, series de televisión, cómics y videojuegos. La interpretación de Arnold Schwarzenegger como el Terminator sigue siendo una de las más icónicas en la historia del cine, aunque siempre nos quedará la duda de como hubiera sido ver al Terminator borracho.