La audiencia está enganchada a Gran Hermano VIP, pero eso no impide que critiquen la actitud de los concursantes día sí día también. Aramís Fuster y Chabelita Pantoja se postulaban como claras preferidas, pero han acabado siendo las primeras expulsadas de la edición. La actualidad de la casa ahora pasa por las constantes peleas y faltas de respeto entre Mónica Hoyos y Miriam Saavedra, las dos exparejas del presentador Carlos Lozano. Aunque lo que menos gusta es el comportamiento machista y grosero de Suso, Omar y Asraf Beno. El malestar de los teleespectadores ha llegado a tal extremo que han creado #AsínoGH, una etiqueta en Twitter en la que comentan los momentos más lamentables del concurso.
La situación en Guadalix de la Sierra es insostenible y las discusiones fuera de tono se están multiplicando. Las acusaciones en la cadena no cesan, y es que muchos lamentan que no actúen ante gestos machistas tan evidentes como los que se ven. Pero eso no es todo, ya que el último cabreo de la audiencia viene porque algunos de los famosos están boicoteando la prueba semanal y evidenciando que no quieren hacer caso a las instrucciones del programa.
Escuchamos todos los que nos decís y lo leemos todo y solo os pedimos una cosa: confianza. Siempre que se produzca algo que se salga de lo normal el equipo de este programa tomará las medidas oportunas #GHVIPLímite4 pic.twitter.com/lR1QXx49lO
— Gran Hermano (@ghoficial) 9 de octubre de 2018
El reality está consiguiendo unas cifras buenísimas, con lo que no pueden permitirse que los teleespectadores dejen de ver las galas al estar enfadados. Es por eso que la dirección ha tomado una determinación y ha pedido a Jorge Javier Vázquez que imponga un ultimátum.
En el programa de este martes, el presentador catalán se ha dirigido directamente a los concursantes y les ha advertido que no tolerarán esta mala actitud. Lo ha hecho dejando las cosas claras: "La dirección propone pruebas y lo que espera GH VIP es que todos los participantes participen, las intenten hacer bien y que con eso el público se divierta y se entretenga. No olvidéis que estamos en un programa de televisión y os está viendo a muchísima gente. La prueba de esta semana era una prueba para todos vosotros, para todos. Requería de generosidad y entrega por ambas partes".
"Ahora debéis cada uno de vosotros preguntarse si habéis estado a la altura. Creo que es importante que os recuerde una palabra que quizás habéis olvidado. Esta palabra es 'respeto'. Las discusiones forman parte de cualquier convivencia, pero las faltas de respeto reiteradas no. Las bromas forman parte de la convivencia, pero las que atentan contra la integridad de una persona no nos hacen gracia ni a nosotros ni a la audiencia que juzgará vuestro concurso", proseguía".
¿El objetivo? Dejar claro que si no vuelve a reinar el respeto, tendrán que abandonar: "Todos tenéis la inteligencia suficiente para superar esta convivencia. De no ser así, las puertas están abiertas. Cada uno de vosotros tenéis que preguntaros si querer seguir concursando, de no ser así, repito, las puertas están abiertas", concluía visiblemente molesto.
Eso sí, una de las primeras cosas que ha querido hacer Jorge es desmentir un rumor que se había extendido a la red en el que se aseguraba que tenían un vídeo de Mónica escupiendo en el plato de Míriam, un gesto completamente intolerable que sería motivo de expulsión directa. El presentador ha asegurado que se ha malinterpretado, que la dirección ha inspeccionado este vídeo y ha visto cómo estaba soplando una servilleta para limpiarla.
Este es el vídeo de la polémica sobre el escupitajo. Lo que tiene Mónica en la mano no es una tostada, es una servilleta. Y no escupe, sopla porque está limpiando. Os agradecemos vuestra pasión pero os rogamos confianza en el programa #GHVIPLímite4 pic.twitter.com/E757q2ioMc
— Gran Hermano (@ghoficial) 9 de octubre de 2018
Verdad o no, lo que es cierto es que Miriam ha sido la protagonista indiscutible de esta última entrega del concurso. Se ha sometido a un interrogatorio sobre su vida en la que se ha hundido y ha acabado llorando desconsoladamente al recordar los dos abortos que ha sufrido: "Lo pasé muy mal. No tuve nada de apoyo por parte de Carlos Lozano, sobre todo durante el segundo. Nada, ni un abrazo. Se lo reprocharé toda la vida". El mediático, desde plató, se justificó diciendo que abortó naturalmente cuando ella estaba en Perú y él aquí y que no pudo hacer nada, y que, además, durante el segundo aborto él llegó a dudar de que el niño fuera suyo.
La noticia de la noche llegó con la salvación de Miriam y de Verdeliss del nombramiento, lo que deja a Omar y Asraf luchando por seguir a la casa una semana más. El jueves sabremos quién de los dos es el siguiente expulsado: ¿quién es más odiado?