Levantarse cada mañana vomitando bilis no está al alcance de todo el mundo. Mientras la fiscalía alemana decide si incitar a poner bombas en cervecerías de Baviera es apología del terrorismo, Federico Jiménez Losantos se ha levantado con ganas de seguir mordiendo y lo ha hecho con la presentadora catalana Susanna Griso, que se negó a defender al locutor de derecha extrema en su programa Espejo público cuando tuvieron que abordar el asunto de las bombas. En el editorial de las 7 de la mañana de su programa, Losantos ha dicho esto:
La editorial dice: "Antena 3 ya no es la tele del PP sino la de Susanna Griso, que el otro día quiso ponerse al nivel de Bild (el diari alemany que acusa Losantos de promoure el terrorisme). Vamos a ver, Susanna, a ver si te enteras. Yo entiendo que ser sobrina de Josep Maria Sala, el que fuera a la cárcel por lo de Filesa es un peso pesado. Que estando casada con un separatista que en sus tuits insulta a España continuamente yo entiendo que es molesto que te lo recuerden, pero que te pongas al nivel del Bild, sentando plaza de analfabeta tratando de meterme a mí el dedo en el ojo y ayudar a tus amigos separatistas catalanes y chorizos de La Sexta tienes que calcular mejor". Hace quedar como moderada a la cadena más furibundamente anti-independentista: Antena 3.
Losantos ataca a Griso y se ríe imitando (eeeh,uuuh) sus vacilacions cuando abordó el asunto y entonces, él que habla de bombas, la remata: "Griso lo más elocuente que hizo fue cruzar las piernas y pasar a otro asunto. Tu cabeza es hermosa, pero sin seso". Contra su familia, su físico y su cerebro. Losantos hace un programa de audiencia cero porque no computa en los medidores del EGM. Se escucha por internet y en algunas emisoras que le concedió Esperanza Aguirre en la comunidad de Madrid. Desde allí tiene que insultar para intentar ser polémico y, sobretodo, por si alguien le responde y le da notoriedad. Griso ha hecho su programa, a menudo líder de las mañanas en España, sin inmutarse.