Por si no había bastantes incendios en 'Sálvame', ya podemos declarar oficialmente uno nuevo. Una guerra abierta y pública entre la colaboradora catalana Laura Fa (a la que se le acumula el trabajo) y un peso pesado de Telecinco y La Fábrica de la Tele: María Patiño. El origen es otra fábrica, la de Gabriel Rufián. El programa de Youtube del diputado de Esquerra en Madrid invitó a la periodista de Badalona, que dio un repaso en toda regla al universo del programa, la cadena y la tele en general. Fiel a su estilo, Laura habló con claridad meridiana, definiendo a presentadores y tertulianos de forma contundente: "Ana Rosa: no puedo decir lo que pienso; Griso: no me gustan cosas que hace; Belén Esteban: le falta formación; Chelo García Cortés: está en edad de jubilarse; Paz Padilla: desubicada"...
Son sólo algunos de los nombres propios que salieron a la palestra, pero hay muchos más. También salió el de Patiño, "una persona peculiar". Peculiar y ofendidita: no tanto por ella misma, sino como consecuencia de ponerse la capa de abogado de causas ajenas. María se ha indignado por la vía empática: "Si hay algo que tengo muy claro es nunca descalificar a compañeros. Se trata de respeto, educación y profesionalidad". Que le pregunten a Alba Carrillo, a ver qué piensa...
Patíño desencadenada y guardiana de la moral (y de Chelo) en Twitter: "Mis padres me enseñaron que la única manera de integrarte en la vida es convivir cono personas diferentes sin señalarlas por no ser como tú", "para mí ser valiente es convivir con ideologías distintas y tener respeto a la experiencia". Su ramalazo, eso sí, no ha quedado sin réplica. Y vaya réplica: Laura Fa se la devuelve multiplicada por 10, sin miedo: "Ay, que importante es verlo todo antes de opinar. No hay ni un solo descalificativo a mis compañeros. Y si tú quieres alimentar el odio en redes hacia mí, guiarte solo por los titulaste y cabrearte sin venir a cuento, hazlo. Allá tú con ese respeto que dices que tienes". La bofetada se ha oído a kilómetros de distancia, pero tiene segunda parte. Y es todavía más demoledora: "Para dar lecciones hay que predicar con el ejemplo. Estoy muy tranquila. Muchísimo".
El impacto ha desestabilizado a Patiño: parecía sacar la bandera blanca, pero no. "Opino de lo que sé y lo que veo!!! Nunca de lo que leo!!! El odio no lo alimento yo", le ha dicho. Unos minutos más tarde, después de echar las culpas del incidente a las redes sociales, ha vuelto a por más: "yo no entro al trapo, pongo su intolerancia al descubierto". Curiosa manera de hacer las paces, la verdad. 'Se viene lío'.
Parecería que en Telecinco sólo algunos escogidos pueden abrir la boca y opinar con libertad. Ya saben de quién hablamos, ¿verdad?