Los informativos de La Sexta echan de menos a una de sus presentadoras titulares: Helena Resano lleva dos semanas encerrada en casa con su familia por culpa del coronavirus. Fue la propia periodista la que, después de ver que su hija de 18 años presentaba síntomas, se realizó una prueba en los servicios médicos de Atresmedia. El resultado: positivo. Abandonó su puesto de trabajo para aislarse con los suyos, que también se hicieron el test, con el mismo diagnóstico. La diferencia: que a Resano le comunicaron la noticia en 24 horas, mientras que el resto, atendidos en el servicio público, tardó 5 días en saberlo. Resano crítica esto por el peligro que supone, así como no por habe recibido la llamada de ningún rastreador. Su responsabilidad, afortunadamente, ha evitado seguir expandiendo la epidemia.
La navarra también ha querido relatado como han sido estos días extraños a su casa. Las han pasado magros, porque la peor parte la ha sufrido su hija Emma. Recuerda la angustia durante tres días muy duros: "Estuvo francamente mal, con fiebre muy alta, apenas se podía mover, lo teníamos que hacer entre mi marido y yo, bañarla... se dormía todo el rato, tenía muchos dolores y no remontaba" Un mensaje conmovedor pero necesario para todos aquellos que desprecian la covid-19 y la comparan con una leve gripe. Una joven sana, fuerte, sin patologías previas, casi vencida por la maldita enfermedad.
Afortunadamente, la hija de Helena ya ha remontado y la familia respira cierta paz. Pronto volverán a sus vidas. Ánimo y felicidades.