No podemos evitar quitarnos el sombrero cuando hablamos de Leo Messi. El maestro del fútbol ha sido el mayor símbolo de la historia del barcelonismo. Su despido dejó tocados a muchos de los seguidores, que no se esperaban su adiós tan pronto. En París hace más frío que en Barcelona y parecía que el argentino se iba apagando poco a poco mientras iban pasando sus partidos. Una vez acabado su contrato con el PSG, Leo Messi escogió, de nuevo, el camino de las flores y las sonrisas para acabar de retirarse más allá del Atlántico, con sus amigos culés, al Inter de Miami. El futbolista ha recuperado todo lo que parecía haber perdido al salir del Barça. Aunque la liga norteamericana no presume de estar dentro de las mejores competiciones del mundo, el delantero ha vuelto a mostrar la risa, abrazado de Luis Suárez, Jordi Alba y Sergio Busquets.

Jordi Alba, Luis Suárez, Leo Messi y Sergio Busquets / Instagram

Cuando un jugador de fútbol está en un equipo que no destaca en las mejores ligas del mundo, ir a la Selección se convierte en una prueba de fuego para él. Demostrar su talento contra los mejores de cada país es una oportunidad única para dar el salto al estrellado. Leo Messi ya no tiene que demostrar nada más, pero los periodos de selecciones son lo más importante que le quedan para disputar. El amor del argentino por su país natal siempre ha sido demostrado públicamente y los episodios de críticas que protagonizaban los periodistas argentinos han quedado atrás después de conseguir alzar el trofeo del Mundial. Ahora, la Selección de Argentina está disputando la clasificación de Sudamérica para el próximo campeonato y, como no podía ser de otra manera, Leo Messi ha vuelto a brillar con un fenomenal partido.

1, 2, 3, un señor hat-trick hizo el argentino que, con 37 años, todavía sigue impresionando al mundo del fútbol. También impresionó a sus hijos y a Antonela Roccuzzo. Así lo vimos en las historias de Instagram de su pareja, que colgó un vídeo enamoradísima alabando su figura. De fondo, los gritos de sus hijos después de uno de sus goles. "Vamos carajo", "Vamoooooos gol papá". Como unos fanáticos más del estadio Monumental. El último comentario deshace a la red, dejando entrever la buena relación que tienen entre todos. "Como me encanta, me encanta, me encanta cuando marca gol papá" le confiesa un hermano a otro. Pudieron disfrutar y gritar en dos ocasiones más. Leo Messi completó la noche perfecta, tres dianas, dos asistencias y la ilusión de sus hijos por ver jugar a su padre cada jornada.

La familia de Leo Messi es una de las favoritas para todo el mundo del fútbol. Las historias entre los hermanos y las personalidades de cada uno emocionan a la red cada vez que escuchan su nombre. Tiago, Mateo y Ciro, un hat-trick de hijos que pueden presumir de tener de padre al mejor futbolista del mundo. Esperamos que cada vez que marque gol Messi no hagan tanto estruendo porque deben arruinar la noche de alguno de los vecinos. La familia Messi es la viva imagen de una familia feliz. Ahora, en los Estados Unidos, enamoran a todos los norteamericanos que encuentran en los diferentes estadios. Cuántos gritos de gol habrá oído Antonela Roccuzzo en su vida y cuántos le quedan para escuchar.