La noche electoral ha sido larga en Andalucía. Susana Díaz todavía no se puede ni creer que la derecha le haya arrancado la mayoría. Santiago Abascal entrando a caballo en el parlamento andaluz es definitivamente la peor de las pesadillas. De momento. Algunos de los que ahora se ponen echan las manos a la cabeza hace tiempo que contribuyen a lo que ayer fue una realidad. La fuerte irrupción de Vox pone a todos los demócratas en alerta. Los que le han dado cabida ahora se lavan las manos.
España es el único país de Europa donde la ultraderecha no existe, decían. Al mismo tiempo que invitaban a los dirigentes de Vox, día sí y día también, a medios de comunicación y concentraciones por la unidad de España. Desde estos espacios, el mensaje ahora claro está. Sacudirse la responsabilidad y culpar los 'indepes', que han "despertado al fascismo".
El último en sumarse a esta tesis es Ignasi Guardans. El exconvergente, que no hace mucho comparaba a los maestros catalanes con los pederastas, no lo ha podido evitar: “Lo de Vox en Andalucía es otra de las aportaciones que debemos agradecer a los independentistas catalanes. Se habría evitado si no se les hubiera dejado contaminar el Gobierno de España”. Como era de esperar, la pizza con piña tiene un culpable y vive en Sant Esteve de les Roures.
Cito a un amigo, que lleva razón: "Lo de VOX en Andalucía es otra de las aportaciones que los demócratas españoles debemos agradecer sinceramente a los independentistas catalanes". Y añado: se habría evitado si no se les hubiera dejado contaminar al Gobierno de España.
— Ignasi Guardans (@iguardans) 2 de diciembre de 2018
Los independentistas lo han reventado todo. Cuarenta años de democracia española al garete. Todo por querer un referéndum de autodeterminación. ¿Cómo han podido romper el pacto constitucional sin calcular las consecuencias? Del Estatut mejor hablamos otro día.
De acuerdo. Pero a quién sorprende?? Toda la vida política española desde hace 40 años era el fruto de un pacto. Imperfecto, como todos. Es el independentismo quien lo ha roto, sin calcular las consecuencias. Y ahora iremos a la ley del más fuerte. Que nunca será el nacionalismo catalán.
— Ignasi Guardans (@iguardans) 2 de diciembre de 2018
El nieto de Francesc Cambó, fundador de la Lliga, cree que Vox es un invento del independentismo para arruinar la carrera política de Inés Arrimadas. Puro marketing para perjudicar Ciudadanos.
Para el Independentismo es un magnífico resultado. ¿Cómo queda en Catalunya @InesArrimadas si es -o aparece políticamente- como la aliada y de Vox cada vez que suba a la tribuna del Parlament?
— Ignasi Guardans (@iguardans) 2 de diciembre de 2018
Pero Guardans nunca tiene suficiente. Los votantes de la ultraderecha son unos angelitos y reciben a todo el mundo con té y galletas danesas: “Yo nunca he tenido problema con los electores de nadie. Ni siquiera con los de Hitler”. ¡Ay, madre! En el mismo saco añade a Bolsonaro, Trump, Le Pen y Salvini.
Yo nunca he tenido problema con los electores de nadie. Ni siquiera los de Hitler. Ni de Bolsonaro, de Trump, de Le Pen o Salvini. Todos en tierras y tiempos diversos. Y todos creyendo que sus líderes eran los más valientes y con soluciones mágicas (y falsas) a problemas reales
— Ignasi Guardans (@iguardans) 2 de diciembre de 2018
Las reacciones en la red no se han hecho esperar. Una tromba de antidemócratas enemigos de Hitler contestan a Ignasi:
Ai, mira, és que no t'aguanto.
— Montse Miralles ����️ (@momibru) 3 de diciembre de 2018
En todo caso ha sido una escalada que empezó antes de que los que nombras independentistas fueran independentistas.
— Ξξ����️#oficialidá ye futuru (@Visente_Mateo) 2 de diciembre de 2018
Exculpar al nacionalismo español, el cual no ha parado de ejercer su fuerza, sólo tiene dos explicaciones
Ninguno te deja bien
¿De la imagen del PP recogiendo firmas contra el Estatuto y usando los tribunales politizados para volar por los aires los consensos alcanzados siguiendo escrupulosamente las reglas del juego ya hablaremos otro día, verdad Ignasi? Aquí se rompe el pacto constitucional.
— Pau Vila (@pauvilagarcia) 3 de diciembre de 2018
Creo Ignasi que en el capítulo de pacto imperfecto té dejas uno importante, ese en el que los catalanes votaron un estatuto que otros se cepillaron, y no fuero los independentistas precisamente.
— Pedro (@pedroroman05) 3 de diciembre de 2018
Si no tienes problema con los electores de Hitler, tienes un gran problema.
— Dam Nuwen (@Dam_Nuwen) 2 de diciembre de 2018
Sea como sea, Vox ya es una realidad. En 2019 hay elecciones autonómicas en trece comunidades, además de las municipales y las europeas. Mientras algunos buscan en Catalunya a los culpables del aumento de la ultraderecha, Vox sigue creciendo. Si nadie se implica, el 26 de mayo la realidad nos volverá a explotar en la cara.