Fue a mediados de marzo cuando Iker Casillas y Sara Carbonero, después de varias semanas de rumores, hicieron oficial lo suyo: divorcio tras once años de relación y dos hijos en común, Lucas y Martín. Desde entonces, la que fuera pareja ha estado en boca de todo el mundo por razones varias, especialmente por las supuestas infidelidades que el del Real Madrid habría cometido estando con la periodista. Unos escándalos a los que tanto Sara como Iker han intentado hacer oídos sordos, con los comentarios y 'me gusta' que se han intercambiado en las redes sociales, demostrando que pese a ya no estar juntos se siguen llevando bien.
El jueves 20 de mayo Iker Casillas cumplió 40 años. Una fecha muy especial para el que fuera portero, en la que recibió una gran cantidad de mensajes por parte de sus amigos y compañeros. Mensajes como el que le mandó Sara Carbonero. La ahora periodista de radio Marca se valió de su cuenta de Instagram, donde publicó una fotografía del que fuera su marido. "Feliz vuelta al sol. Que las vistas desde ese cuarto piso sean maravillosas. Te lo mereces", escribió, junto un emoticono de estrellas doradas. Hablamos de esto.
Unas palabras de las que todo el mundo se hizo eco. Aunque, lo más fuerte estaba aun por venir. La misma noche del jueves 20 de mayo, Sara Carbonero, Iker Casillas y sus dos hijos, tras dos meses separados, se volvieron a juntar. La primera vez que se vieron las caras en todo este largo tiempo. El motivo no fue otro que para celebrar el cumpleaños del que fuera jugador de fútbol. Un momento para el recuerdo del que Casillas ha presumido en sus redes. Lo ha hecho con la siguiente fotografía:
Globos, tarta y vestidos con sus mejores galas. No faltó de nada para festejar que Casillas ha empezado una nueva década en su vida. "Alguien de verdad me puede confirmar que los 40 de hoy son los 30 de hace años??", escribió el de Móstoles en sus redes en motivo de su aniversario. Un encuentro que ha hecho saltar todas las alarmas, acerca de una posible reconciliación entre la que fuera pareja. Unos rumores que los protagonistas, por el momento, ni afirman, ni desmienten. Donde hubo fuego, quedan cenizas. ¿Será verdad?