Inés Arrimadas en Espejo público. Da igual cuando lean esto. Entrevista número 2.628.639 de Susanna Griso a la política naranja. La nueva líder de Cs debe tener ya una placa conmemorativa a su nombre en un rincón del plató. Hoy ha vuelto, vía dúplex.
Dicen que la cara es el espejo del alma. Los que tienen mucha cara son los de este espejo público. Arrimadas se debe ver muy reflejada en el espejo que le proporciona semana tras semana el matinal de Antena 3. Hoy, más minutos llenándose la boca sobre la reunión del infierno que ella considera que fue la mesa de negociación entre los gobiernos españoles y catalán. Más minutos de mitin patrocinado por Griso y compañía, más minutos para darse autoabombo... Y cero minutos, ni segundos, sobre uno de los temas del día. Manda huevos, que diría alguien.
Desde primera hora de la mañana, de hecho, desde ayer a última hora de la noche, que se ha hecho pública una exclusiva de eldiario.es: "Ciudadanos tenía a sueldo como asesor a un miembro de la Junta Electoral Central que resolvió reclamaciones del partido". Explican que Andrés Betancor compatibilizó su cargo en el máximo órgano electoral con despacho y sueldo a costa de Ciudadanos, falló en contra del independentismo y resolvió recursos presentados por su propio partido. Todo muy normal. Cs pagando mensualmente a un vocal de la JEC mientras participaba en debates decisivos sobre el conflicto catalán.
...¿Cuántas veces ha sonado el nombre de este catedrático de Derecho Administrativo en la Universidad Pompeu Fabra en la conversación entre Susanna Griso e Inés Arrimadas?.... Cero. Una vergüenza. E indignación máxima:
La verdad es que este jueves, el programa se está cubriendo de gloria. No sólo han callado una de las noticias del día teniendo cómo tenían a la misma Arrimadas en directo, sino que también han dado voz a un hombre que maltrató a su pareja y agredió al hombre que trató de impedirlo:
No le preguntan a Arrimadas lo que toca y dejan explayarse a un maltratador... Así es este programa, que por mucho que parezca mentira, siempre pueden superarse.