Isa Pantoja vive uno de los momentos más dulces de su vida mientras crece en su vientre el que será su segundo hijo, fruto de su consolidada relación con Asraf Beno. La pareja, que se ha mostrado cómplice durante todo el embarazo, cuenta los días para el gran acontecimiento. Sin embargo, una sombra empaña esta felicidad: la frialdad absoluta de Isabel Pantoja, quien no ha movido ni un dedo por conocer detalles del futuro miembro de la familia. Ni un mensaje de apoyo, ni una llamada interesándose por el estado de su hija o el desarrollo del embarazo. La artista ha optado por el silencio más cruel, ignorando por completo una etapa clave en la vida de Isa. A pesar de que se trata de su propio nieto, la tonadillera ha demostrado que sus conflictos con sus hijos pesan más que cualquier vínculo familiar.

Isabel Pantoja se desentiende del embarazo de Isa Pi

Mientras Isabel guarda un mutismo doloroso, Isa y Asraf no han parado de compartir cada avance en la preparación del hogar a través de sus redes sociales. Desde la transformación de un vestidor en una adorable habitación infantil hasta la ecografía en 5D donde vieron por primera vez el rostro de su bebé, cada instante rebosa intimidad y alegría. Sin embargo, estos momentos son celebrados únicamente por amigos y seguidores, jamás por la abuela materna. Lo más llamativo es que ni siquiera un pequeño gesto simbólico ha salido del entorno de la tonadillera. Ni un peluche, ni una llamada de cortesía. Nada. Isabel Pantoja ha preferido mantenerse completamente al margen, como si la llegada de este niño no tuviera absolutamente nada que ver con ella. Una postura que muchos tachan de injustificable e insensible.

El apoyo que no llega de su madre, lo encuentra en Anabel Pantoja

Afortunadamente, Isa Pantoja no está sola. La que sí ha demostrado estar a la altura del momento ha sido su prima, Anabel Pantoja, quien recientemente fue madre y ha querido compartir su experiencia regalándole a Isa una tierna tortuga de luz para el bebé. Un detalle sencillo, pero lleno de significado, que demuestra que el amor familiar aún puede manifestarse, aunque no provenga de donde se esperaba.

Mientras tanto, Isa ha tenido que lidiar con las molestias físicas del embarazo sin la contención emocional de su madre. Dolores de espalda, noches interrumpidas y cambios hormonales se han hecho presentes, aunque la colaboradora los afronta con humor y resiliencia. Asraf Beno ha sido su mayor pilar, acompañándola en sesiones médicas y en la toma de decisiones sobre la crianza. Quienes conocen a Isabel Pantoja saben que cuando toma una decisión, lo hace de forma definitiva. Y en este caso, ni la inocencia de un recién nacido han sido suficientes para ablandar su corazón. La indiferencia con la que ha tratado este embarazo indica que la artista no está dispuesta a perdonar, ni a Isa ni a su pareja.

La pregunta que muchos se hacen es clara: ¿Cambiará de actitud cuando nazca el bebé? Lo cierto es que las probabilidades son escasas. Sus acciones han hablado alto y claro. Para Isabel, el hijo de Asraf e Isa parece no existir. El nacimiento del pequeño está previsto para junio. Será entonces cuando se sabrá si la artista decide enterrar el hacha de guerra o si, por el contrario, prolonga este silencio desgarrador.