El romance entre Isabel Pantoja y Paquirri fue uno de los más seguidos y comentados en la España de los 80. La tonadillera y el torero parecían la pareja perfecta, pero detrás de esa fachada de amor eterno, se escondía una realidad llena de inseguridades y rivalidades que terminaron por envenenar la relación. Y es que Paquirri no solo tenía ojos para la reina de la copla, sino que había otra mujer que lo volvía loco: Bárbara Rey, la vedette de moda en aquellos años, y una sombra que Isabel jamás pudo soportar.
Antes de que Isabel Pantoja entrara en la vida de Paquirri, el torero tenía una intensa relación con Bárbara Rey, una de las mujeres más deseadas y escandalosas de la época. La vedette, quien hoy en día sigue siendo el centro de atención por su polémica relación con el rey emérito Juan Carlos I, tenía a Paquirri completamente embelesado. Se dice que el torero, aunque mantenía un contacto con varias mujeres, entre ellas Lolita, estaba especialmente atraído por Bárbara.
Es más, según fuentes cercanas a ambos, Paquirri y Bárbara Rey compartieron un sinfín de momentos apasionados, aunque su relación nunca llegó al altar. ¿El motivo? Según las propias palabras de Bárbara, "no me casé con Paquirri porque yo no era virgen y él quería una". Esta confesión, que para muchos puede parecer una anécdota del pasado, cobra ahora mayor relevancia al entender el verdadero carácter conservador del torero, quien deseaba una mujer "pura" para llevarla al altar, lo que lo llevó a elegir finalmente a Isabel Pantoja como su esposa.
Bárbara Rey, la enemiga número uno de Isabel Pantoja
Ahora bien, a pesar de haberse casado con Paquirri, Isabel Pantoja nunca pudo superar los celos que sentía por Bárbara Rey. El simple hecho de oír su nombre provocaba la furia de la tonadillera, quien veía en la vedette una amenaza constante para su matrimonio. Los rumores de la época indican que Isabel no solo odiaba a Bárbara por ser una mujer de la que Paquirri había estado enamorado, sino también porque ella sabía que Bárbara lo volvía loco de una manera que ella nunca pudo lograr. El torero intentaba tranquilizar a Isabel, pero las dudas y los fantasmas del pasado siempre estaban presentes. Para colmo, en aquellos años, Bárbara Rey era una de las mujeres más deseadas y comentadas en la prensa, especialmente por su cercana relación con el rey emérito, Juan Carlos I, lo que aumentaba su notoriedad.
El día que Juan Carlos I llegó a Cantora por Bárbara Rey
Pero Isabel Pantoja no era la única que sufría ataques de celos, también Juan Carlos I protagonizó uno de los episodios más inesperados de esta historia. En 1979, mientras Paquirri aún mantenía contacto con Bárbara Rey, un helicóptero aterrizó inesperadamente en Cantora. El rey emérito, visiblemente alterado y sin escolta, exigió hablar con el torero en un ataque de celos que dejó a todos atónitos. Según testigos, Juan Carlos I había descubierto la relación entre Bárbara y Paquirri, y decidió poner fin a la situación de una manera tajante. Aunque los detalles de la conversación entre el torero y el monarca no han sido revelados, lo cierto es que, para el alivio de Isabel Pantoja, después de ese encuentro, Paquirri nunca volvió a reunirse con Bárbara Rey.