El comienzo de 2025 no pinta nada bien para Isabel Pantoja. Tras cerrar su Gira 50 Aniversario con un desolador concierto en Madrid, donde solo logró vender 2.500 entradas de las 7.000 disponibles, la tonadillera ve ahora cómo su última esperanza económica peligra. Y es que, según el cronista Kike Calleja en Vamos a ver de Telecinco, Isabel Pantoja ha visto cómo su ambicioso proyecto audiovisual, una serie biográfica sobre su vida, se ha quedado en el aire por un motivo delicado: su negativa a hablar de sus relaciones con Encarna Sánchez y María del Monte.

Un biopic millonario que lo cambiaría todo

El proyecto prometía ser la tabla de salvación económica definitiva para la tonadillera. Según el periodista Antonio Rossi, la cantidad acordada sería tan elevada que Isabel “no tendría que volver a subirse a un escenario en su vida”. Un dinero que, sin duda, podría enterrar de una vez por todas las abultadas deudas que la persiguen desde hace años. Sin embargo, el principal escollo para que la serie vea la luz reside en un tema espinoso: su amistad especial con Encarna Sánchez y María del Monte. Para los productores, estas figuras son fundamentales en la historia de Isabel Pantoja, y su ausencia restaría autenticidad y atractivo al relato.

La negativa de la artista a permitir que se aborden estas relaciones ha llevado a un punto muerto en las negociaciones, poniendo en riesgo un acuerdo que parecía estar prácticamente cerrado. El proyecto era su gran esperanza, su última bala para recuperarse económicamente y vivir con tranquilidad. Pero Isabel ha demostrado, una vez más, que hay temas en su vida que prefiere mantener en secreto, aunque ello implique renunciar a una fortuna millonaria.

La reacción de María del Monte: indiferencia total

Ante la polémica, María del Monte ha respondido con su habitual estilo seco y directo. Al ser preguntada por los periodistas sobre el veto de Isabel a hablar de su relación en la serie, María simplemente respondió: “Pufff. Oy, feliz año, salud para todo el mundo, lo demás ya lo buscaremos. Hasta lueguito”, según recoge Europa Press. Una reacción que deja claro que María no piensa entrar al trapo ni alimentar más especulaciones sobre su relación con la tonadillera.

El precio del silencio

El dilema para Isabel Pantoja es claro: aceptar abrir esa puerta a su vida privada y asegurar su futuro económico, o mantener su veto y arriesgarse a ver cómo su última oportunidad de estabilidad financiera se desvanece. Mientras tanto, la tonadillera sigue en su residencia, rodeada de los suyos, y con la incertidumbre de si finalmente accederá a que la serie cuente toda la verdad sobre su vida, incluidas las amistades especiales que marcaron su camino. El tiempo dirá si Isabel Pantoja está dispuesta a pagar el altísimo precio de su silencio.