La relación entre Isabel Preysler y Julio Iglesias, dos de los nombres más emblemáticos del mundo del espectáculo y la sociedad española, vuelve a ser noticia. En esta ocasión, no por sus historias del pasado, sino por un momento crítico: el diagnóstico médico del legendario cantante, que, según fuentes cercanas, no es alentador. Diego Arrabal, periodista especializado en crónica social, ha encendido las alarmas al revelar detalles del delicado estado de salud del intérprete de “Hey”.

En las últimas semanas, las preocupaciones sobre la salud de Julio Iglesias han aumentado, alimentadas por las recientes imágenes divulgadas por Arrabal en su canal de YouTube. Estas fotografías muestran a un cantante irreconocible, con evidentes problemas de movilidad que dificultan su día a día. “Julio Iglesias no está bien, desgraciadamente. Los años pasan factura”, afirmó el periodista en un tono sombrío que dejó helados a sus seguidores.

Según revelan las fuentes, Isabel Preysler, exesposa del cantante y madre de tres de sus hijos, ha tomado un rol activo en esta situación, al punto de informar a su familia sobre el crítico diagnóstico médico de Julio. Preysler, conocida por mantener la unión entre sus hijos, incluso con aquellos que tuvo con Carlos Falcó y Miguel Boyer, habría propuesto una reunión familiar en Miami para visitar al artista, quien permanece recluido en su lujosa residencia en las Bahamas.

Problemas de movilidad y terapias físicas: la lucha de Julio Iglesias

Desde hace años, los problemas de movilidad de Julio Iglesias han sido motivo de preocupación. Un accidente en su juventud, mientras era portero del Real Madrid, marcó su vida con secuelas físicas que se han agravado con el paso del tiempo. Actualmente, el cantante recurre a ejercicios acuáticos diarios como parte de un programa de fisioterapia supervisado, diseñado para aliviar el dolor y mejorar su movilidad.

Sin embargo, estas medidas no han sido suficientes para frenar el evidente deterioro físico que reflejan las imágenes recientes. Julio, que ahora depende de un carrito de golf para moverse por su hogar, está lejos de la figura imponente que dominaba los escenarios. La posibilidad de volver a ver al artista en público parece cada vez más lejana, y la incertidumbre sobre su futuro no deja de crecer.

Miranda e Isabel, los principales pilares de apoyo para el cantante

En medio de esta situación, Miranda Rijnsburger, esposa de Julio Iglesias, se ha convertido en su principal pilar. Siempre a su lado, Miranda no solo se encarga de supervisar su cuidado físico, sino también de garantizar la estabilidad emocional del cantante. Por su parte, los hijos de Julio, repartidos entre Europa y Estados Unidos, mantienen un contacto constante con su padre y aprovechan cada oportunidad para visitarlo.

Aunque Isabel Preysler y Julio Iglesias llevan décadas separados, el cariño y respeto mutuo nunca se ha desvanecido. Su vínculo, fortalecido por los hijos que tienen en común, ha llevado a la socialité a involucrarse profundamente en esta etapa complicada. La “reina de corazones” está decidida a que sus hijos comprendan la gravedad de la situación y apoyen a su padre en lo que podría ser uno de los momentos más críticos de su vida.