Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa pusieron fin a su relación sentimental a finales del año pasado. Se acabó un amor que venía durando desde 2014. El escritor peruano fue el sustituto de Miguel Boyer de cuya muerte solo habían pasado siete meses cuando empezaron a salir. Como en otras ocasiones en el pasado, la socialité no tardó en buscar un relevo que cogiera el testigo del amor. Es de esas personas que no saben estar solas.
De hecho, poco después de romper su relación con Vargas Llosa ya le atribuyeron una nueva relación. En concreto, dos meses de después. Isabel batió su propio record. No es baladí que la llamen 'Reina de corazones'.
Isabel Preysler no tarda en encontrar un sustituto de Mario Vargas Llosa
Quien soltó la primicia fue Paloma Barrientos, colaboradora del programa ‘Fiesta’ que presenta Emma García los fines de semana en Telecinco. La periodista aseguró que Isabel Preysler estaba ilusionándose con un nuevo amor. “Se ven fuera del país, es un señor que está divorciado de unos 70 años con muy buen aspecto” reveló la colaboradora.
Dicho nuevo amor sería un empresario muy bien relacionado y con un patrimonio considerable. Y no solo eso. Barrientos señaló que los encuentros entre Isabel y este hombre se venían produciendo desde hacía meses. No obstante, no trascendió el nombre de este posible nuevo amor.
Mucha complicidad entre Isabel Preysler y Alfonso Díez
Lo que sí han habido son sospechas de quién podría ser. Y algunas fuentes apuntan a Alfonso Díez, viudo de la duquesa de Alba. La descripción encajaría a la perfección. 72 años, muy bien relacionado y con un patrimonio que deja sin hipo. Estas dos últimas virtudes son las que más gustan a la Preysler.
Según las Mamarazzi Laura Fa y Lorena Vázquez, Isabel y Alfonso ya fueron vistos juntos en una cena de parejitas por Madrid en abril. Mientras que el pasado fin de semana volvieron a coincidir en público. Fue en la boda de Sol Medina y Pedro Domínguez-Majón celebrada en Sevilla.
Un evento en el que los testigos aseguran que se les vio tener una gran complicidad. No pasó nada entre ellos. Al menos en público. Pero se les notó muy cercanos en todo momento. La fiesta se alargó hasta altas horas de la madrugada, tras las cuales abandonaron el lugar con una enorme sonrisa que refuerza los rumores surgidos en abril.