Isabel Preysler, la eterna socialité y referente indiscutible de la prensa rosa, vuelve a ser protagonista en el mundo del corazón. Tras su sonada ruptura con el escritor Mario Vargas Llosa, Isabel, a sus 73 años, parece haber encontrado una nueva ilusión sentimental. Esta vez, el elegido no es ningún conocido empresario sevillano, sino un millonario misterioso con el que ha sido vista fuera de Madrid, disfrutando de encuentros discretos y alejados del bullicio mediático.
Un amor discreto lejos de los focos
Según ha revelado la periodista Paloma Barrientos, Isabel Preysler, aunque pueda parecer tradicional en sus formas, sigue siendo una mujer activa en el amor. La comunicadora ha señalado que la vida amorosa de Isabel ha sido siempre vibrante y apasionada, y que no sorprende que haya encontrado una nueva ilusión con rapidez. Las escapadas románticas de Isabel con este enigmático millonario han tenido como escenario lugares fuera de la capital española, espacios donde ambos pueden disfrutar de su relación sin la presión de los flashes y los titulares estridentes. Esta estrategia de discreción no es nueva para la Preysler, quien, a lo largo de su vida, ha sabido manejar con maestría el equilibrio entre lo público y lo privado. De acuerdo con fuentes cercanas a la socialité, Isabel siempre ha sabido proteger su vida privada cuando lo ha considerado necesario, evitando que sus romances recientes se conviertan en un espectáculo mediático.
Un historial amoroso marcado por la elegancia y la polémica
La vida sentimental de Isabel Preysler ha sido siempre un foco de atención. Desde su primer matrimonio con Julio Iglesias en 1971, que la catapultó al estrellato, hasta su relación más reciente con Mario Vargas Llosa, Isabel ha demostrado que el amor puede ser intenso, efímero y, sobre todo, transformador. Su relación con Carlos Falcó, marqués de Griñón, le otorgó no solo un título nobiliario, sino también a su hija más mediática, Tamara Falcó. Posteriormente, su unión con Miguel Boyer fue, quizá, el capítulo más estable y duradero de su vida amorosa, marcado por la complicidad y el respeto mutuo.
Sin embargo, fue su relación con Mario Vargas Llosa la que trajo el mayor huracán mediático. A pesar de su ruptura en 2022, ambos han mantenido las formas, dejando claro que el respeto prevalece por encima de las diferencias. Ahora, con este nuevo millonario, Isabel parece decidida a escribir un nuevo capítulo en su vida sentimental. Aunque el misterio envuelve la identidad de su acompañante, lo cierto es que las escapadas fuera de Madrid son cada vez más frecuentes, y las especulaciones, imparables. 2025 podría ser, sin duda, el año del amor para Isabel Preysler. Una nueva historia se está escribiendo, y aunque Isabel intenta mantenerla bajo llave, el interés público es insaciable. La reina de corazones vuelve a brillar, y, esta vez, parece que el destino le ha reservado un final digno de una novela romántica.