Surrealista. Pintoresco. Grotesco... cutre, también. A veces los catalanes somos rematadamente bobos en algunas cosas, masoquistas incluso. Ayer, en 'La Isla de las Tentaciones', Claudia Martínez, la novia de Javi, lo dejó patente. Sandra Barneda sacó el tema de la noche: unos calzoncillos horrendos, frikis, alucinógenos. Fíjense:
Sí, son unos calzoncillos con la cara de Claudia tipo reno -Rudolph, quizás- con corazones. No es una sorna del programa, no: fue el propio Javi el que se los llevó a su villa porque ella se los había regalado en el último San Valentín. Fue el mismo Javi también el que los mostró a cámara, explicó su gran significado para él y se montó una historia con estos, una goma de pelo y un perfume que le birló a su pareja antes de entrar en el dating show de Telecinco. "Siempre me pongo lo mismo para dormir: la goma del pelo, los calzoncillos y una crema de cara. Huele mucho a ella. Cierro los ojos y pienso que puede estar aquí conmigo", aseguraba Javi, muy emocionado. Lo peor no es eso, es que en las imágenes sale oliéndolos y besuqueándolos, modo fetichista.
"En los calzoncillos la veo (se olvidó decir que la ve vestida de reno) y me recuerda a un momento muy feliz, como todos los que tengo con ella. Parece una chorrada, pero a mí me ayuda mucho. Me los pongo cada noche para dormir", describía Javi ante cámaras sin darse cuenta realmente de lo que estaba diciendo. Y es que el amor te hace hacer cosas que nunca pensabas que harías. Cosas tan chorras como esta. Al volver a plató para comentar el vídeo, Barneda se recochineaba: "A ver, Jaime (el padre de Claudia), te tengo que hacer la pregunta: ¿tiene Claudia unas braguitas con la cara de Javi vestido de reno?". El plató estallaba a risas y Marta Peñate ponía la guinda al pastel: "¿En broma? Tu hija es mala persona". Sandra, remataba: "Será el próximo regalo de Navidad de todas las parejas". Risas.
Incorporación murciana
Unos llegan y otros se piran. Barneda anunció ayer que una de las parejas actuales se tendrá que marchar en la próxima hoguera, mientras que otra entrará a concursar. Cristian y Ana serán concursantes de pleno derecho y se expondrán a las tentaciones de las dos villas. Originales de Murcia, los dos llevan año y medio juntos y consideran los celos su principal problema. El noviazgo se creó a raíz de una infidelidad de Cristian con su antigua novia, con la cual estuvo casado. ¿Volverá aquí a caer en la tentación? Las perspectivas no son las más halagüeñas, desde luego...