En TV siempre hay dos gremios que triunfan en audiencia y en popularidad: los meteorólogos y los chefs. Son dos cosas que todo el mundo hace: mirar al cielo y comer. Todos son admirados. Todos los hombres y mujeres del tiempo ganan en fama a los presentadores, pero en el caso de los cocineros, la cosa es un poco diferente. TV3 no tiene chefs en nómina. Los contrata y los cambia. Desde hace años Marc Ribas lo hace todo: el programa diario de recetas, Cuines, líder destacado, y el show nocturno Joc de cartes, líder destacado. Ribas es telegénico, simpático y cocina de rechupete. Este verano ha vuelto a hacer vacaciones en su querida Tossa de Mar (Costa Brava) a navegar en familia con su mujer y dos hijas y pescar en la playa de la Mar Menuda. Pequeño, fuerte y guapo y con unas bermudas de La Brutal.
Antes que él en TV3 ha habido otros chefs estrella, dejando de lado al mítico Jaume Pastallé (Bona cuina!) que no era cocinero. Quizás el único que lo igualó en fama fue su predecesor: Isma Prados. Su programa de media hora, Cuina per solters y La cuina de l'Isma, se emitía no a la hora de comer sino a la hora de cocinar, sobre la 1 y media. Después del mítico programa TVist y antes del TN comarcas. El TVist se lo acabó comiendo, nunca mejor dicho. Su programa se canceló. Isma Prados desapareció de TV3 pero sigue haciendo de cocinero. A los 49 años tiene otro look:
Isma Prados triunfó joven en TV3. El de Sabadell dio el salto a La Sexta con el programa Hoy cocinas tú. Prados es un apasionado por la cocina desde los 14 años, cuando debutó en los fogones de un restaurante durante unas vacaciones. Después de cinco años en los medios (2003-2008) en que entró en las casas de los catalanes a través de programas de cocina, Prados presta sus servicios a empresas productoras de alimentos, como Ametller Origen o La Sirena. También ha hecho de profesor durante cinco años del Grado en Ciencias Culinarias y Gastronómicas del CETT-Universitat de Barcelona. Sin redes sociales, ahora opina que la fama es "como una zanahoria colgada de una caña de pescar que te lleva a lugares donde no querrías estar".
Durante aquella época dorada de TV3 no podía caminar por la calle. Ahora se hace fotos con paradistas que en su mercado son más conocidas que él. Ahora es más de investigación y desarrollo. "En aquel momento vi un camino a seguir en I+D, pero en grandes producciones alimentarias: aprender a formular alimentos. Sabía cuándo estaba a punto un caldo, cuándo la salsa había perdido la acidez del tomate..., pero transmitir todo eso en la gran producción de alimentos es complejo". La mejor foto del actual Isma estl lado de Marc Ribas: pasado y presente de la cocina en TV3:
Prados y Ribas, pedagógicos apasionados, populares, carismáticos, cocineros. La leyenda negra de los chefs habla de demasiado trabajo. demasiada presión, demasiadas horas, demasiado de todo. Un trabajo duro, creativo, físico y mental, una pasión hipnótica. La audiencia se queda enganchada viéndolos moverse entre fogones. No todos pueden ser Karlos Arguiñano que a los 74 años sigue haciendo tele. Son de otra pasta.