Pedro Sánchez ya es presidente y su esposa Begoña Gómez ya es la segunda dama de España (la primera es Letizia). En Blau ya hizo el perfil de la nueva inquilina de la Moncloa pero quien ha sido bastante menos amable es Jaime Peñafiel en El Mundo. El diario madrileño no es demasiado amigo del PSOE y su manía a Sánchez se ha contagiado a Gómez. Peñafiel escribe: "Se le ha visto siempre el plumero y las ganas de estar en La Moncloa". La realidad es que la más ansiosa por ocuparla era Ana Botella. La mujer de Aznar fue la única que aprovechó su posición para acabar de alcaldesa de Madrid sin pasar por las urnas, al dimitir Gallardón.

Begoña Gómez beso pedro sánchez

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Pero Peñafiel es más de derechas que su diario y le reprocha incluso que luciera una gigantesca bandera española:  "Cuando Pedro Sánchez era proclamado candidato del PSOE a la presidencia del Gobierno, en un escenario presidido por una gigantesca bandera de España, sólo faltaba Marta Sánchez cantando el himno nacional con su ridícula letra. Pero allí estaba Begoña, su esposa, agarrada de su mano, saludando a los enfervorizados partidarios y besándole".

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La define como una mujer ambiciosa, pedante y con afán de protagonismo "Su ambición no tiene límite, convirtiéndose en la auténtica protagonista, gesticulando ante las cámaras de televisión con inequívocos signos de victoria". La compara con Michelle Obama porque sabe que cualquier primera dama perdería en el símil. "Presumía ante sus amigas de lo atareada que estaría cuando su marido llegara a la Presidencia". La memoria de Peñafiel, o la edad, hace que recuerde el nombre de pila de las 6 que la han precedido: por orden cronológico Amparo, Pilar, Carmen, Ana, Sonsoles y Elvira.

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También le duele el gesto que tuvo desde la tribuna de invitados del Congreso el día de la moción de censura: "¡Ay! Ese guiño de complicidad tras la votación a su esposa en la tribuna de invitados. ¡Lo hemos conseguido"!. Peñafiel habría preferido, como su diario, que la siguiente inquilina de la Moncloa fuera Beatriz Tajuelo, la segunda mujer de Albert Rivera. En una cosa coincidiría Tajuelo con la primera dama de España: Letizia es divorciada y Rivera también. Pero El Mundo y Peñafiel tendrán que esperar para tener una inquilina naranja en Moncloa. De momento es roja.