Risto Mejide ha vuelto con un nuevo Chester que ha puesto la carne de gallina a los teleespectadores. En esta ocasión han sido los Javis los que se han sincerado con él, comentando lo dura que fue su infancia. El acoso escolar ha sido uno de los temas estrella, abriéndose en canal Javier Ambrossi confesando cómo lo maltrataron.

El matrimonio se ha convertido en la pareja de moda, cogiendo muchísima popularidad al empezar a ser profesores de Operación Triunfo protagonizando vídeos muy divertidos con los concursantes y, sobre todo, después del emotivo discurso que hizo Javier Calvo en la gala de los Feroz: unas palabras dirigidas a todas aquellas personas homosexuales que como él han sufrido algún problema por serlo.

Pues bien, ante Risto incidieron en cómo lo pasaron cuando salieron del armario. Todo, con un testimonio bomba: "Escuchabas siempre cosas a tus espaldas, la gente se reía de ti en clase siempre, temes ponerte el primero en el bus por escuchar siempre las risas de fondo. Yo iba con miedo a clase. A mí de repente me han tirado un diccionario en medio de clase o todos se han puesto de acuerdo para pegarme cuando salía por la puerta. No tenía ganas de ir a la escuela porque sabía que me harían daño", decía Ambrossi.

Su marido recalcó que esto es una vergüenza, criticando que los profesores sean incapaces de impedir este acoso: "La humanidad puede hacer un cohete, ir a la Luna, hacer mil cosas científicas y no puede conseguir que un profesor controle que 20 alumnos no hagan bullying a un niño". Siguiendo el relato de Ambrossi: "Tengo los pensamientos del Opus metidos dentro, porque hay profesores que han permitido que la clase se riera de mí, que pusieran en la pizarra que los gais iban al infierno... He tenido un desarrollo sexual errático, no ha sido un camino bonito".

De hecho, el actor de Física o Química añadió que también él lo pasó mal al colegio: "Lo pasé mal. Me he sentido rechazado. No he sido el más guay del cole... He tenido un niño en clase que cuándo pasaba por el pasillo todos los días religiosamente me decía "¡Calvo, maricón!" (...) Yo sentí miedo de joven para ser gay. Me juré a mí mismo que nunca lo diría, que viviría una vida de mentira toda mi vida porque sientes que nadie te amará".

Haz clic en la imagen para ver el vídeo / Cuatro

Eso sí, quisieron restar el máximo de peso posible a esta terrible situación: "El acoso no nos ha hecho como somos. Somos lo que somos a pesar del acoso". Un mensaje contundente que dejó sin palabras a la audiencia.