El pasado 9 de agosto se cumplieron cuatro años desde el fallecimiento de Humberto Janeiro, el patriarca del clan Janeiro, que dejó este mundo a los 76 años tras sufrir un fallo multiorgánico. Sin embargo, la historia que rodea sus últimos días sigue estando envuelta en polémica, especialmente tras las declaraciones recientes de su última pareja, Camila Naranjo. Ella no se ha guardado nada y ha lanzado acusaciones directas contra aquellos que, según afirma, dejaron morir a Humberto con el corazón roto.

En el ojo del huracán se encuentra Jesulín de Ubrique, el reconocido torero y su hijo mayor, quien, según Naranjo, no visitó a su padre en ocho largos años, a pesar de vivir a solo diez minutos de distancia de la finca familiar. “Humberto se ha muerto con las ganas de que Jesús fuera a verle. Ocho años a diez minutos de la finca y no iba a verlo. Lloraba muchas veces por él. Humberto no se ha sentido querido por su hijo”, declaró Naranjo, visiblemente emocionada. Según Camila, el dolor de Humberto por la ausencia de su hijo fue un lastre que lo acompañó hasta sus últimos días, dejando una herida abierta que nunca cicatrizó. Pero no solo la distancia física fue la causante de este dolor, sino también la distancia emocional, que parece haber sido insalvable entre padre e hijo.

El torero escondido en el baño: un encuentro surrealista en el hospital

Uno de los momentos más impactantes relatados por Naranjo fue un episodio ocurrido en un hospital, cuando Humberto Janeiro estaba ingresado por sus problemas de salud. Camila, al regresar de desayunar, se encontró con Jesulín de Ubrique escondido en el cuarto de baño del hospital, en un intento de evitar encontrarse con ella. “Entré de la calle, de desayunar, y veo a Jesulín en el cuarto de baño escondido. Me morí de la risa”, relató Camila, quien todavía no conocía personalmente al famoso torero, durante su intervención en el programa ‘TardeAR’. La situación fue tan incómoda que decidió marcharse para darle privacidad a Jesulín con su padre, sin imaginar que este sería uno de los últimos encuentros entre ellos.

Las revelaciones de Camila Naranjo no se detuvieron en aquel encuentro incómodo en el hospital. Durante su emotiva entrevista, también desmintió las críticas que los hijos de Humberto solían lanzar contra él, describiéndolo como una figura terrible y problemática. “Los hijos no conocían al padre. Lo tenían machacado. Decían que el padre había sido muy malo… ¡Mentira! La mejor persona del mundo entero”, aseveró, defendiendo fervientemente la memoria de Humberto y apuntando a Jesulín como uno de los más distantes.

El silencio de Jesulín: ¿culpable o víctima?

Ante estas declaraciones explosivas, Jesulín de Ubrique ha optado por mantenerse en silencio, alimentando aún más la controversia. Su falta de respuesta ha dejado a la opinión pública dividida: algunos lo ven como un hijo desagradecido, mientras que otros creen que hay más detrás de la historia que no ha sido contado. Lo que sí es cierto es que la sombra de su ausencia en los momentos finales de Humberto Janeiro ha puesto en duda la imagen que Jesulín había intentado construir fuera de los ruedos.