Desde hace varios días, el bailarín de Granada, Rafael Amargo, está en boca de todo el mundo. ¿El motivo? Que la Policía Nacional le detuviese en el marco de una operación, que todavía está abierta, en la que se le acusa de delitos de organización criminal y tráfico de drogas. Un escenario, muy turbio y oscuro, que ha servido para que muchos periodistas tiren de la manta y hablen alto y claro acerca del artista. María Patiño, Belén Esteban o Antonio David Flores son algunos de los muchos famosos que han desvelado la relación del pasado que mantuvieron con Rafael Amargo.
Una serie de testimonios que se suman a la que un famoso periodista del corazón ha contado en las últimas horas. Hablamos, atención porque es fuerte, del conocido y polémico Jesús Mariñas. "No fue más que sexo, atracción física, un pasatiempo, solo dos o tres veces. Tonteamos como con otros muchos", escribe el de La Coruña en su crónica del periódico La Razón. Unos encuentros llenos de pasión, que tuvieron lugar hace muchos años y sirvieron para que los dos se aprovecharan mutuamente. "El capricho o distracción era simplemente física porque débil es la carne, y más en plena juventud", apunta Mariñas.
Pues Rafael Amargo nunca se ha escondido de lo mucho que le gusta y divierte practicar sexo. En agosto del 2018, por ejemplo, concedió una polémica entrevista para el periódico El Mundo en la que afirmó que es "bisexual, creyente, hetero, entero y redondo". Además matizó que no se considera una persona gay porque es una palabra que no le gusta. "Tampoco me gusta celebrar la fiesta del orgullo gay", añadió. Y es que para fiestas, las que se monta en su casa.