La entrada de Cristóbal Martell, abogado de VIPS y poderosos, está poniendo patas arriba la situación de Dani Alves. El mito del F.C.Barcelona y la selección brasileña está en la cárcel por una presunta agresión sexual que tuvo lugar el pasado 30 de diciembre en el Sutton de la capital catalana. Alves negó los hechos ofreciendo versiones diferentes en el transcurso de la investigación. Sus contradicciones hicieron que la jueza lo enviara a prisión sin fianza. Está en Brians 2, esperando una maniobra mágica de Martell. El contraataque es contundente: tras el análisis de las cámaras, rechaza la agresión. No así que Dani mantuvo relaciones con la joven en los lavabos de la zona VIP. Sexo consentido. Una estrategia que deja a su esposa, Joana Sanz, en una posición complicada.
Sanz está viviendo el peor año de su vida. En un mes ha perdido a su madre, víctima del cáncer, y a su marido, acusado de un crimen execrable. La modelo lo defendió desde el primer momento: "Yo he visto muchas veces como mujeres se acercan en el reservado, atrevidas, a intentar algo con mi marido en mi cara. Si lo hacen en mi presencia no me quiero imaginar cuando yo no estoy. Yo sé quién es mi marido, yo sé cómo le conocí, sé lo respetuoso que es porque ni cuando me estaba conociendo a mí me faltó al respeto". La venda no tardó en caer. Alves no es un santo. Como mínimo ya ha admitido que es infiel. Y miedoso: alega "temor reverencial" a la reacción de Sanz. Si además es un agresor sexual es lo que tiene que dictaminar la justicia. La respuesta de la canaria después de saberse la nueva dirección de la defensa, borrar las fotos conjuntas en Instagram. ¿Todas? No.
Joana Sanz, de borrar (algunas) fotos con Dani Alves a pedirle el divorcio. Ella lo niega
El gesto de hacer desaparecer a Alves de la cuenta pareció la sentencia. Pero curiosamentea día de hoy el brasileño está muy presente: guarda un buen puñado de vídeos y fotografías de momentos felices. Viajes a Balín, Maldivas, París... si quería desmarcarse, sorprende no eliminar este contenido tan explícito teniendo en cuenta la deslealtad y la mentira. La guinda llegaba ayer, cuando 'El Programa de Ana Rosa' dejaba una bomba: aseguraban que Joana le había pedido el divorcio. "¿Cómo se ha enterado el futbolista? Por sus abogados, que se lo han comunicado, ya que Joana le pidió un vis a vis para decírselo pero él no quiso recibirla". Un extremo desmentido por la joven. "Si no tenéis noticias, os las inventáis". También sobre lo que afirmaban le habría dicho Alves a su mujer el día de los hechos: "En un principio Joana iba a salir con su marido y amigos y fue el propio Alves quien dijo que 'no era un plan para chicas'".
El mensaje de Joana Sanz sobre la víctima de la presunta agresión sexual: "Falso"
Total, que su comportamiento está llamando la atención. Las sospechas crecen. Hay quien piensa que el divorcio forma parte de la las instrucciones del abogado catalán, a quién por cierto no le constaría la petición de disolución del matrimonio. Una nueva publicación de la de Tenerife despierta suspicacias, rechazando más informaciones aparecidas en los medios. Una de ellas, que "no duda del testimonio de la víctima". Falso, sentencia Joana. "¡Pero qué estáis diciendo!". Sanz siembra la duda, le dice 'no te creo'.
La separación, ¿una intención real o una trampa para ayudar a Alves a salir del pozo? Seguiremos atentos.