La nueva temporada de TV3 confirma que nada ha cambiado: los programas estrella siguen en plena forma. 'El foraster' se sale de la gráfica, 'Està Passant' es intratable, 'Polònia' es un martillo... y 'Joc de Cartes' nunca empacha. El primer día, un 25,5%. Brutal es quedarse corto. Marc Ribas empezaba un nuevo curso del reality y concurso culinario con un capítulo dedicado a la judía del ganxet del Vallès, pero bien podría haberlo titulado "En busca del veneno perdido". Mira que hemos visto de todo, pero la actuación de una concursante ha batido récords de mala leche. Es Pilar, de La Granja de Vaquerisses. Ojalá que lo que enseñó por televisión sea un papel muy bien ejecutado. Era la reina del mal.

Gastronómicamente hablando, no hay ningún tipo de duda que ninguno de los 4 restauradores del duelo experimentará un aumento de las reservas en sus locales. La mediocridad era la norma. Por eso el programa apostó por otras vías de entretenimiento, como dejar hacer, decir y remover a Pilar. Apretó el acelerador a fondo para intentar ganar el premio, dedicándose a destrozar a los rivales con muecas pueriles, comentarios hirientes y mala educación galopante. A Jalil li hizo la cruz, el chico demostró una paciencia más que infinita. Especialmente cuando le dio de comer cerdo, cuando es musulmán y había avisado de su particularidad. Unos canelones de boletus donde no había boletus, pero sí carne en abundancia, y que ni siquiera preparaban en casa (los compra hechos), la definen a ella y a su establecimiento. Pero no acaba aquí el drama... o la historia de terror.

Pilar, en el centro, y Jalil, a la izquierda, en 'Joc de Cartes' / TV3

Otro de los detalles que convertían a la concursante en la mala malísima de 'Joc de Cartes' fue que no decía ni una palabra en catalán. Qué narices una palabra, ni una sílaba. Ni por equivocación. No es la primera vez que alguien no utiliza la lengua del país en el programa de TV3, pero incluso en su caso la cosa era extraordinaria. Nadie que viera el espacio desde el sofá de su casa empatizaba con ella, no había para dónde cogerla. Total, que se hundió. Acabó tercera y gracias. Y eso porque Montse, la que quedó en la cola, era un trozo de pan. Si hubiera sido un poco más astuta y más competitiva, la habría superado. Pero da la impresión de que Montse tendrá la conciencia tranquila. Otros no estamos tan seguros.

Pilar, en 'Joc de Cartes' / TV3

Los espectadores inauguraron esta séptima temporada con un clásico, los comentarios en directo de la batalla de restauradores. No esperen sorpresas, Pilar no sale bien parada. Si le importa o si era lo que esperaba conseguir es un misterio que solo sabe ella. En todo caso, exponer tu negocio de esta manera parece atrevido. Temerario, también. El show en la tele está bien, pero hay que saber medir. Y lo que vimos con nuestros ojos era todo lo contrario: desmesurado. Una jugada fatal.