Este martes 24 de septiembre, Jordi Basté, como cada día, hacía su tertulia en El món a RAC1, y uno de los temas estrellas ha sido nuestra lengua catalana: la inmersión lingüística, normalización de la lengua, la oficialidad del catalán en Europa, cómo el Gobierno no garantiza la presencia del catalán a la justicia y muchas derivadas sobre esta cuestión. Entre los tertulianos, un Joan López-Alegre haciendo sus habituales quejas y lamentaciones defendiendo el castellano y poniendo las manos en el cielo sobre "cómo puede haber tantas normativas, leyes y dinero" sobre el catalán en Catalunya, "¿¿y la conclusión es que el catalán está en crisis?? o indignándose de "cómo podemos tener un Estatuto que hace incluso una distinción discriminatoria del castellano, diciendo que la lengua propia de Catalunya es el catalán y que la otra es una lengua oficial, cosa que me parece una equivocación." Y remata con un "mi percepción es que en los registros, juzgados, el uso del catalán ha avanzado muchísimo". Las cifras no dicen lo mismo.
Después de dejarlo hablar, a él y al resto de tertulianos de este martes, Jordi Basté no se ha podido estar de decir también la suya y ha querido dejar claro qué piensa. Un Basté encendido defendiendo el catalán, que cogido el turno de palabra justo después de que López-Alegre haya preguntado "¿en cuántos colegios se ha sancionado todos estos años por no aplicar la normalización? ¿Es que no tenemos inspectores? Aquí falla alguna cosa, o es que realmente no tenéis nunca suficiente?". Interviene Basté: "El catalán se está perdiendo y se está muriendo. Y como no ayudemos todos, pensemos como pensemos, seamos o no independentistas, se nos va a hacer puñetas el catalán. Y no es cuestión de ley, es cuestión de uso. Y el uso se está perdiendo, por muchos motivos. Primero porque hay gente que habla un idioma que domina, el castellano, mucha gente viene de otros países y con el castellano ya les es suficiente para ir a trabajar porque nadie les exige que aprendan el catalán. Y así se irá a hacer puñetas".
Basté sigue poniendo casuística del día a día: "Que cuando dices 'Bon dia', haya el 80% de la gente de Barcelona, y creo que hago corto, que ya no te contesta 'Bon dia'. ¿Los entiendo? Sí, claro está. Pero también quiero que me entendieran cuando yo hablo en catalán. Y no es ninguna maldad, es mi lengua materna. Y no pasa nada. Y no lo puedo hacer. Y hay mucha gente que no lo cambia. Que yo, como catalán, no pueda ir a según qué lugares, que no pueda pedir un café con leche y todavía te traigan un café con hielo!! Anda, ¿cómo te pasas? No. Sigue pasando. Hay mucha gente que con el castellano ya tiene suficiente... ¿'pa' qué narices voy a aprender catalán'?. Y qué pasa?: que esta lengua se va amortiguando, empequeñeciendo. Si la utilizamos como una arma política, nos iremos a hacer puñetas. Que en según qué escuelas, en el patio, se hable en castellano, a mí me preocupa. Que en los bares no pueda pedir un café en catalán porque si no ya tienes que cambiar al castellano, porque lleva tres meses, y no le interesa..., también. O tres años, o diez. Vienen y no quieren aprender catalán, pero si se marchan a Nueva York, aprendiendo inglés y reniegan del castellano. Quiero defender que el catalán pueda seguir siendo una lengua importante. Y lo digo por todo el mundo, que todavía espero que Leo Messi cuándo recoge la medalla de oro del Parlament de Catalunya lo diga en catalán".
Claro y catalán. Tiene toda la razón.