Presten atención a esta fecha: jueves 16 de marzo. De hoy en diez. Un día importante. Un día marcado en rojo. ¿Dónde? En el calendario personal y vital del gran Jordi Basté. Aquel día cambiará todo... Rectificamos: aquel día, VOLVERÁ a cambiar todo. Pero vayamos por partes. El periodista de RAC1, el más escuchado de Catalunya, aparte de conducir el programa más escuchado por los catalanes, cada mañana, su imprescindible El món a RAC1, también colabora con La Vanguardia escribiendo un par de columnas semanales. Y la de este lunes ha sido una declaración de intenciones. Una sincera confesión. Un propósito a ojos de todo el país, dejando constancia por escrito de su firme decisión.

Jordi Basté - Sergi Alcàzar

Hace un tiempo, unos cuantos años ya, Jordi Basté emocionó a sus compañeros, amigos y familiares. Especialmente, a las personas que más quiere del mundo, sus hijas. Hace siete años, su hija mayor, que entonces tenía 12 años, le hizo una petición: que dejara de fumar. Y lo hizo de aquella manera que solo tienen los niños: siendo directos y dejándose de dobles sentidos: "Me pidió que dejara de fumar porque no quería que me muriera", reconoce Basté. Claro y catalán. Sin interpretaciones posibles. "Nunca olvidaré el lugar y la hora", dice él recordando el momento que se lo dijo. Y después de prepararse, leyendo y consultando a médicos, así lo hizo. Era el 18 de enero del 2016. ¿Qué decía aquel día?: La foto es fea pero el objetivo se lo vale: el último cigarro. Hoy dejo de fumar".

¿Qué dice ahora?: "Se acabó"... O no tanto. "Me autoproclamé fumador en el paro porque temía volver a caer. Y así fue". Porque sí. Jordi ha vuelto a caer, como él temía. Fue el pasado mes de junio, aunque lo ha hecho público ahora. Estaba cenando con unos amigos en la Bodega Sepúlveda de Barcelona y un amigo salió a fumar... Jordi le dijo que le liara uno a él. "Me lo fumé y no pasó nada". Pero una semana más tarde, cayó otro. Y en julio ya se fumaba tres al día. Y en agosto, "escondía los paquetes debajo de las toallas para que mis hijas no los vieran". Cigarrillos a escondidas todo el verano, "compraba Listerine a granel para evitar la pestilencia bucal y me perfumaba para ir a la playa". Las hijas saben que ha vuelto, pero evita fumar delante suyo "así no verán como la cabeza de su padre rueda de vergüenza por los suelos".

Jordi Basté / @jordibaste

Basté, harto, ha vuelto a coger el toro por los cuernos, "ha llegado el momento", porque con el tabaco, como él dice, "si te caes, el orgullo de volver a ponerte de pie es infinito. Lo dejo nuevamente". No lo hará solo. Un colega, Josep Martí Blanch, lo hará con él, después de que el jueves salieran a fumar juntos, en una pausa de su programa, y al entrar, "nos deberíamos dar tanto asco mutuamente que al volver a entrar en el estudio lo decidí". Y ha puesto fecha, el mencionado 16 de marzo. Promete que la noche anterior colgará, como hace siete años, "el último cigarrillo en un funeral con vistas a Instagram. Y no habrá más felicidad en nuestras vidas, que gracias a la confesión y la promesa en esta columna, volveré a intentarlo y conseguirlo". Seguro que lo hará. Y no estará solo. Según nos ha comunicado el mismo Basté, "ya hay gente que me ha dicho que también lo hará con nosotros"... Ya lo saben, si alguien más se anima, recuerdan esta fecha: 16 de marzo.