Son muchos años escuchando El món a RAC1. Muchos años levantándonos y encendiendo la radio para oír las noticias que Jordi Basté y su equipo dan en el programa más escuchado de Catalunya. Muchos años sintonizando RAC1 y oyendo, mientras nos preparamos el café, nos lavamos los dientes o nos duchamos, el imperdible 'delantal' del locutor catalán, el editorial que cada mañana comparte con los oyentes y donde deja su firma sobre alguno de los temas del día. Pero no recordamos ninguno como el de hoy. O para ser más exactos, no recordamos ningún día donde hayamos oído a Basté tan asqueado como esta mañana del jueves, 6 de octubre.
El comunicador ha estallado de mala manera, escandalizado como no le recordamos. Tanto, que incluso ha avisado, al empezar, de que los oyentes que estuvieran en casa con sus hijos, preparándose para ir hacia la escuela, o estuvieran con la radio del coche puesta, con los más pequeños, camino de clase, apagaran por unos minutos la radio para no oír lo que tenía que decir: "Si hay alguna criatura, apagad la radio. Unos minutos. Volved a encender dentro de cuatro minutos. No es broma, porque es muy serio y pido disculpas, incontables disculpas porque es horario protegido. Lo que diré ahora es asqueroso, inmoral e intolerable, pero después lo entenderéis. Este delantal de hoy está totalmente prohibido a los niños y niñas". ¿Por qué? Porque ha reproducido algunas de las letras de un "rapero que se hace llamar Santaflow, que canta vómitos, como tantos otros." Se refiere a Iván Santos Ortiz, un productor y rapero de Algete, Madrid, que ha sido invitado este fin de semana para cerrar las jornadas Viva22 organizadas por Vox en Mad Cool de Valdebebas, dentro de unas jornadas patrióticas de la ultraderecha para celebrar el Día de la Hispanidad. Un acto donde, atención, ya se han inscrito 20.000 personas.
Este personaje, por llamarle de manera suave, ha perpetrado algunas frases directamente abyectas, vomitivas y asquerosas, que Basté ha reproducido, no sin pedir perdón una y mil veces antes de hacerlo: "Os leo letras y, reitero, disculpad". Y no es para menos. Pedimos disculpas también desde aquí. Atención a las perlas de este energúmeno: "Tu novia es más cerda que Peggy. Me he follado a tantas divas que no sé si tengo el sida. Daría mi coche por tirarme a Angelina Jolie grabarla haciéndome una paja con los pies. Quiero pegar al mariconazo de Jorge Javier y que quede muda la burra de Belén Esteban. Quisiera ser julai para pillar todos los días y es que a tres de cada diez zorras que veo, me las petaría". O: "Si alguien piensa diferente, lo quemáis por maricón". Hay más: "Mis gustos sexuales van rosando lo asqueroso. Me ponen cachondo las abuelitas del bus. Reventarles el potorro hasta que salga pus. Follarme a una mora y limpiarme con su bulca. Cada nueva pista vuelve a enfurecer a otra gorda feminista. ¿Piensas que doy asco? Pues tienes razón". La única cosa que canta en la que estamos al 100 por ciento de acuerdo con él. Asco absoluto.
Basté alucina y acaba su 'Delantal' de manera demoledora: "El personaje que ha escrito estos vómitos ha sido invitado por Vox a la fiesta del partido político en Madrid, titulada Viva22. La libertad de expresión a veces no es agradable, sin embargo, en cambio, es imprescindible y tiene que ser idéntica para todo el mundo. Y en España no lo es. Qué asco. En algunos casos este rapero pidió disculpas por algunas de estas letras, igual que Josep Arenes, Valtònyc, a quien hoy envío un fuerte abrazo, que no puede volver a casa por haber escrito que 'Los Borbones son unos ladrones'. Uno será invitado a una fiesta de un partido político con representación en el Congreso de los Diputados y el otro está exiliado en Bruselas".
No se puede decir más claro. Esto es España. Así es España.