Hay un ser peludo que odia la Navidad y que estos días está adquiriendo mucho protagonismo. Es El Grinch, la película infantil estrenada estas Fiestas. Después está Jordi Cañas. Su cruzada contra los símbolos navideños no tiene fin: primero fue contra el Tió, después contra los tradicionales christmas o felicitaciones navideñas y ahora contra los Reyes de Oriente. Más concretamente contra la Feria de Reyes de la Gran Vía de Barcelona. Un lugar donde tradicionalmente los catalanes buscan regalos de última hora. La Feria se ha apmpliado a juguetes, artesanos y paradas de gadgets temáticos, también independentistas. Por si algún Rey Mago quiere regalar un pin de lazo amarillo o una baldosa que diga "Orgulloso de ser catalán". Un drama para Ciudadanos. Este es el tuit de uno de los 5 concejales naranjas en el Ayuntamiento de BCN:
El concejal Sierra encuentra indignante que entre las decenas de chiringuitos de la Feria haya dos con material independentista. No sólo venden esteladas sino también banderas de Tabarnia (la pela es la pela): aquellas de la Cruz de Sant Jordi con la senyera. Las encontrarán en la parte izquierda de la imagen:
Pero Jordi Cañas explota contra todo lo que huele a Navidad. Ya tiene un nuevo tuit anti-navideño para la colección:
La red le suplica a Cañas que deje tranquila la Navidad y la ciudadanía que compre lo que quiera:
El último tuit es el que acierta: Ciudadanos llena las calles de carpas, mesas y puestos con merchandising naranja. Quizás Cañas se refiere a la manía de Cs de siempre: los menores. Pero la Feria de Reyes hace años que no está dirigida a los niños sino a los adultos que compran. Las paradas que critica no son infantiles. Si lo que quiere es distanciar paradas indepes de lugares con niños, como si fueran estancos o sex shop, que gane Manuel Valls y que cambie la normativa. Si Cañas critica las Campanadas en TV3 de su moderadora Helena G. Melero habrá hecho bingo.